“Quería unirlos y por suerte lo pude cumplir”. El millonario Pablo Pérez Companc contó así su objetivo para traer a la provincia por primera vez uno de sus autos preferidos, el Zonda Revolution, creación del genio santafesino Horacio Pagani (sólo comparte apellido y nombre con el periodista deportivo) y así que transitara las siempre temidas curvas del autódromo El Zonda-Eduardo Copello, nombre en el cual se inspiró Pagani. Fue una mañana y siesta diferente en la Quebrada Rugiente, con 4.000 sanjuaninos que se acercaron para observar de cerca al auto que más rápido transitó por ese asfalto: el ‘Zonda R’, del cual se crearon apenas cinco y que tiene un valor actual que asciende los 2,3 millones de dólares, llegó a marcar en su velocímetro 315 km/h.
Las tandas en que el Zonda salía a pista eran de cuatro vueltas a máxima velocidad para el deleite de los fierreros, que se acercaron en gran número teniendo en cuenta el frío en el autódromo, pero con el plus a favor de ser la entrada libre y gratuita. Además, hubo decenas de afortunados que se pudieron sacar una selfie histórica junto al ‘bicho negro’ de fibra de carbono, que pesa 1.070 kilos, cuenta con sexta marcha, acelera de 0 a 100 kilómetros en 2,6 segundos, posee un motor Mercedes-AMG (como todos los de Pagani Automobili) de 12 cilindros en V, para sus 800 caballos de potencia. Tal cual apodan al Zonda Revolution, “una auténtica bestia”.
“Por un tema de extensión de la pista, el auto no lo pude hacer llegar en ningún lado a más de 315 km/h, pero estoy convencido que puede alcanzar los 370 km/h”, remarcó el hijo de Gregorio Pérez Companc, el empresario de 82 años propietario de Molinos Río de la Plata, cuya fortuna se calcula en la actualidad en cerca de 1.800 millones de dólares.
Los “tremendo”, “único”, “impresionante” se multiplicaron en la jornada de ayer en El Zonda por parte de los espectadores. Entre ellos, estuvieron los pilotos profesionales Fabián Flaqué, Fabricio Persia y Lino Sisterna.
Como todo auto creado por Pagani Automobili, salvo el motor todo lo demás es diseñado a mano por la automotriz con sede en Italia y propiedad de ese hombre nacido en Casilda hace 61 años. Son ‘fierros’ creados a imagen y semejanza de los dueños, quienes intervienen en su diseño de manera directa. En el caso del Zonda hay diferentes versiones, pero el Revolution es el más veloz de todos y el primero en producirse fue hace cuatro años.
Particularidades
Sin licencia ni seguro
Por su condición de súper deportivo, no tiene licencia para transitar las calles en nuestro país y ninguna aseguradora quiso brindarle sus servicios.
De Da Vinci a Fangio
Pagani (foto) siempre cuenta que se inspira en las obras de Leonardo da Vinci para crear sus modelos de autos súper deportivos. “Es la mezcla justa entre arte y ciencia. Leonardo logró eso y uno, humildemente, busca hacer algo parecido y de buen gusto”, resumió el santafesino en más de una entrevista, quien se mudó a Italia con 21 años luego de ser recomendado en la década del ‘80 por Juan Manuel Fangio. El Chueco conoció los modelos que producía por entonces y le mandó una carta de recomendación a varias automotrices de primer nivel y Lamborghini le dio su chance inicial.