En el día posterior a la eliminación, los jugadores de UPCN todavía reconocían que la tristeza no se había separado de ellos. ‘Desde que estoy en UPCN es el peor momento que me tocó vivir‘, reconoció abiertamente el capitán Javier Filardi, mientras que Sebastián Brajkovic, reconoció que ‘recién el lunes‘ cree que podrá resetear sus sensaciones. ‘Estamos acostumbrados prácticamente sólo a ganar‘, admitió Matías Salvo.
Mientras se iban reuniendo todos los jugadores para almorzar en el hotel Mercure, donde se hospedan en Belo Horizonte, para luego ir a presenciar los dos duelos de semifinales en el estadio Divino Braga de Betim, los rostros mostraban que las frases no eran sólo de ocasión.
‘Lo bueno es que esto es deporte y el deporte siempre da revancha. Es cierto que falta tiempo para otro compromiso internacional como el Sudamericano, pero ya comienza la Copa ACLAV y la Liga y entonces nos enfocamos rápido en eso‘, señaló Brajkovic.
‘Pagamos muy caro los errores de no haber cerrado los sets contra Bolívar en un partido que a mi entender no jugamos mal y luego repetimos algo de eso contra Tentrino. Pero ahora lo que vale es poner la cabeza fría y habrá que trabajar más todavía en los entrenamientos para afrontar lo que viene‘, indicó Filardi.
‘Es un poco raro quedarse dos días sin jugar y maquinandose la cabeza, pero ya está. Tampoco sirve mucho pensar demasiado el tema sino prepararse para lo que viene‘, resumió Sebastián Garrocq, el jugador que vivió todas las emociones desde el comienzo de la década.