San Lorenzo volvió a respirar después de dos semanas de serias complicaciones al imponerse por 2 a 0 a Huracán, en Parque de los Patricios, donde los dirigidos por Angel Cappa siguieron sin levantar cabeza y cada vez se alejan más de la clasificación a la Copa Libertadores.
Durante el primer tiempo los de Parque de los Patricios por lo menos pudieron apropiarse de la pelota durante varios pasajes, pero como siempre, se quedaron sin ideas cada vez que merodearon el área rival.
Sin embargo en ese aspecto San Lorenzo tampoco le fue en zaga, ya que en esa etapa apenas registró una llegada de riesgo además del prematuro gol de cabeza de Renato Civelli y fue recién a los 40 minutos, cuando Juan Carlos Menseguez pecó de individualista y desperdició una buena oportunidad.
San Lorenzo recién se animó a ir por más en pos de aumentar con el arranque del segundo tiempo, cuando fue lentamente convirtiendo en figura al arquero local, Gastón Monzón, que una y otra vez salvó su valla demostrando buenos reflejos.
Claro que cuando a los 12 minutos de esa etapa final el capitán Paolo Goltz se excedió en una protesta al árbitro Sergio Pezzotta y vio la tarjeta roja, Huracán perdió definitivamente la brújula y quedó definitivamente expuesto a las contras de su rival. Simeone leyó bien esta situación e hizo debutar al africano Félix Orode, quien habilitó con precisión a Juan Manuel Torres para definir el partido sobre el final y quedarse con el clásico.

