El seleccionado argentino de hockey sobre césped femenino, Las Leonas, se coronó campeón del Champions Trophy desarrollado en Sydney al vencer en definición por penales a Australia por 4-3, después de que los 70 minutos de juego finalizaran igualados sin goles al igual que los 15 del alargue. De esta manera, el equipo albiceleste alcanzó su tercer título en la historia del certamen que reúne a los seis mejores seleccionados del mundo, ya que antes lo había logrado en 2001 y 2008.

Tras un partido en el que los nervios se devoraron a las jugadoras de ambos equipos y hubo escasas llegadas a los arcos a lo largo de los 85 minutos de juego, Belén Succi, elegida merecidamente como la mejor arquera del torneo, se convirtió en la heroína al desviar los remates de Nicole Arrold y Fiona Boyce.

Después de que la arquera del CASI se quedara con el disparo de esta última, Luciana Aymar ejecutó con precisión el último disparo de la serie y desató la locura de las conducidas por Carlos Retegui, quien inició su era como entrenador del seleccionado con una actuación soñada.

Argentina dominó las acciones en la primera parte, pero después no pudo sostener la presión ejercida por las australianas, que por momentos fue tan intensa que se pareció a la del equipo oceánico que dominó el panorama del hockey mundial durante los ’90 y el año 2000.

Retegui dispuso una defensa de cuatro jugadoras, lo que le brindó al equipo gran solidez en las últimas 25 yardas. Pero Aymar perdió compañía en el medio y prácticamente se debatió sola ante las volantes y defensoras australianas.

Por eso el equipo quedó fraccionado, ya que ni las mediocampistas ni las delanteras aprovecharon los espacios que generaba Lucha, que llegó a ser marcada hasta por cinco jugadoras locales.

En un intercambio de pelotas pero sin peligros de gol, el partido en tiempo reglamentario cerró sin goles y lo mismo pasó en el alargue. Entonces fueron a la definición por penales y Las Leonas estuvieron más certeras, coronándose campeonas invictas en el inicio de una etapa que tiene como objetivo recuperar la corona mundial que se pondrá en juego el año próximo en Rosario.