Boca derrotó anoche 1 a 0 a Vélez en Mar del Plata y con este resultado se clasificó a la fase de grupos de la Copa Libertadores y dejó al conjunto de Liniers afuera de la máxima competencia continental. El único gol lo anotó el marcador lateral izquierdo Nicolás Colazo, a los 33 minutos del primer tiempo. Mientras que Estudiantes disputará el repechaje, a inicio de febrero.
Boca empezó el juego que definía su clasificación directa a la Copa Libertadores con más actitud que Vélez y lo presionó constantemente.

Boca, si bien dependió de arrestos individuales, tuvo un remate de Jonathan Calleri a los 27m. que contuvo Sebastián Sosa y un cabezazo errado César Meli a los 43m. como las llegadas más claras. La apertura del marcador llegó a los 33m., cuando el lateral izquierdo Nicolás Colazo, de buen partido, remató desde la banda izquierda cerca del vértice del área grande, y su zurdazo se clavó en el ángulo superior derecho de un Sosa que nada pudo hacer por la potencia y la precisión del remate.

La segunda etapa fue una continuidad de la primera. Ambos equipos continuaron mostrando imprecisiones y se abusó del juego brusco. Tal vez la presión de un partido decisivo se evidenció en los pocos momentos de buen fútbol que tuvo el encuentro. Boca fue un poco más que Vélez, ante todo por las actuaciones individuales, pero se notó la falta de un conductor natural para ser más contundente y aprovechar las ventajas defensivas que dejaron los de Liniers.

Los dirigidos por Miguel Ángel Russo mostraron poco y nada en ofensiva, y aun en el pequeño transcurso que tuvieron un hombre de más por la expulsión de Andrés Chávez, siempre se notó que no tenía material el Fortín como para estirar este desempate a un alargue.