Gracias al talento y empuje de los pibes, Boca aplastó 4-0 a Monagas y selló su clasificación a los octavos de final de la Copa Libertadores como líder del Grupo F. Una Bombonera repleta gritó con alma y vida los goles de Marcelo Weigandt, Valentín Barco y de Luis Vázquez, quien se destapó y marcó por duplicado en una noche redonda. Ahora, habrá que esperar el sorteo del próximo miércoles en la Conmebol para saber los cruces de octavos de final, donde puede darse un superclásico ya que River fue uno de los segundos.

El Xeneize manejó los hilos del partido apenas saltó al campo de juego y buscó rápidamente la conquista que le asegurara el primer puesto en su grupo. Al cuarto de hora, el VAR acaparó el centro de la escena: Valentín Barco quedó mano a mano, fue derribado en el área y el juez Andrés Matonte sancionó penal. Sin embargo, después de ver al lineman y analizar la jugada en la pantalla a un costado de los bancos, revirtió su fallo por posición adelantada.

El recién se activó a los 30 minutos después de que Marcelo Weigandt reventara el poste con un cabezazo furibundo tras un tiro de esquina. En el mejor momento de Boca en la etapa inicial, Bruno Valdez se excedió verbalmente con el árbitro y vio la segunda amarilla en tan solo unos segundos.

El hombre de menos no le impidió al conjunto de La Ribera seguir manejando la pelota y buscar el 1-0, que llegó sobre el cierre de los primeros 45 minutos por medio de la aparición sorpresiva de Weigandt, quien capitalizó en el área un centro-remate de Payero.

En el complemento, la roja a Abdiel Arroyo le abrió los caminos a Boca. Después de un frentazo al poste de Miguel Merentiel, Valentín Barco le puso el broche de oro a una gran combinación con Frank Fabra: el Colo entró a toda velocidad a zona de peligro, clavó su derechazo contra un rincón y se trepó al alambrado para festejarlo con los hinchas.

Las últimas dos conquistas llegaron por medio de Vázquez, quien aprovechó las fisuras de la defensa de Monagas y se despachó con un doblete para el 4-0.

Con este aplastante resultado, Boca cerró su Grupo F como líder (está como tercer mejor primero) y llega envalentonado a los octavos, aunque el entrenador xeneize, Jorge Almirón sabe que harán falta un puñado de refuerzos de jerarquía para ir por el máximo objetivo de todo el mundo Boca.

 

Román y su donación

Román Riquelme (foto), ídolo y vicepresidente de Boca, explicó su decisión de que la recaudación de la despedida del domingo vaya para un gimnasio de las inferiores en el predio de Ezeiza, a pesar de que el estatuto del club indica que el dinero le correspondería al protagonista en un evento de este estilo.

"Boca, como institución, en el libro de actas tiene de regalo hacerse cargo de los gastos de esa fiesta. Todo lo que se recaudó es para la persona a la que se le hizo la fiesta", contó en una entrevista con Flavio Azzaro.

Luego, Román reveló el pedido que le hizo a sus pares de la dirigencia: "Yo hice lo que siento, le pedí por favor a la Comisión Directiva que, con lo que se recaudaba, se paguen todos los gastos y, con lo que sobre, se va a hacer el gimnasio para los chicos de inferiores. Mi sueño es que el predio sea cada vez más lindo".

En ese sentido, aseguró que habría tenido ese gesto aún si no era vicepresidente. "Yo pienso que sí. Para mí es demasiado. No puedo recibir tanto cariño y tanto amor, es demasiado", sentenció.