Boca Juniors sigue sin encontrar el rumbo al empatar en la Bombonera con Estudiantes de La Plata sin abrir el marcador, en partido de la undécima fecha del torneo Inicial Eva Perón 2012 de fútbol. Boca, que en la próxima fecha visitará a River Plate en el superclásico, sumó su cuarto partido sin ganar (dos caídas y dos empates) y, con 18 puntos, quedó a cinco del líder, Newell‘s Old Boys. La igualdad, así, no los acercó a la pelea y tampoco los alejó, pero en lo anímico pareció mejor negocio para el ‘Pincha‘.
Consumado el 0-0, los hinchas de Boca se unieron en un reclamo: “El domingo cueste lo que cueste, el domingo tenemos que ganar”. Boca tuvo la opción más clara para abrir el marcador en el primer tiempo, pero fue sobre el cierre: Guillermo Fernández finalmente se sumó en la ofensiva por derecha y habilitó a Viatri, que no fue preciso en la definición y permitió la buena reacción de Villar. Antes de eso, el equipo de Julio César Falcioni exhibió todas las limitaciones de los últimos tiempos y fue dominado por Estudiantes. Porque Paredes y Fernández no resultaron el revulsivo buscado, otra vez falló la sociedad entre Somoza y Erviti, los delanteros quedaron desconectados y solamente la ineficacia de Estudiantes para generar riesgo frente al arco de Orión le permitió a Boca llegar al descanso con el marcador en cero. Los de Diego Cagna se hicieron superiores con armas simples pero efectivas: el dominio de Román Martínez en el medio, el aprovechamiento de los espacios por los laterales y la movilidad de Carrillo en la línea alta.
El que primero se aproximó al gol en el complemento fue, otra vez, Estudiantes: a los seis minutos, Orión debió exigirse para sacar al córner un remate de Fernández. Y Boca respondió con un centro frontal que Viatri, sobre la línea final, quiso transformar en asistencia pero Villar se lo impidió. Después, a los 35, Zapata se escapó por la derecha, envió el centro y Carrillo remató desviado. A los 40, Schunke casi vence su propio arco con un despeje que dio en el palo derecho. Nada más. La expectativa, de allí hasta el final, se centró en lo que sería la despedida. Que fue la ya narrada: Boca Juniors irá al Monumental con la exigencia del triunfo. Otro resultado lo alejará del sueño de campeón y pondrá en la cuerda floja a Falcioni.
