
Buenos Aires, DyN
Boca Juniors mantuvo su puntaje ideal y el primer puesto con una resonante goleada de 4-0 en su visita a Vélez Sarsfield, en un partido que por las complicaciones que el ganador tuvo al principio no permitía suponer tal desenlace.
Dos veces Darío Benedetto, Nicolás Domínguez en contra y el colombiano Frank Fabra fueron autores de los goles que establecieron la amplia diferencia en favor del último campeón en el estadio "José Amalfitani".
Precisamente Benedetto y Fabra fueron dos de las grandes figuras de Boca. Con ellos se destacó Pablo Pérez, pero recién en la segunda parte encontró el líder libertades para jugar y una de sus virtudes fue la paciencia para sobrellevar las dificultades iniciales.
Boca le sacó el jugo a la única acción clara que se le presentó en todo el primer tiempo a los 14 minutos, de contraataque. Fabra cortó y salió desde atrás, jugó con Pérez, que volvió a abrir para que el colombiano llegara al fondo y sacara el centro bajo que encontró a Benedetto ante el arco, sin oposición para convertir.
Vélez metió al equipo de Guillermo Barros Schelotto en un partido incómodo, lo privó de la pelota sobre la base de un gran despliegue físico y le cortó todos los circuitos en un desarrollo cargado de tensión y muy friccionado.
Ahora bien, el repertorio de los dirigidos por Omar De Felippe se agotó en esa presión para recuperar y no dejar progresar al adversario, ya que a la hora de atacar no encontró ninguna fórmula, rebotó permanentemente contra dos centrales muy firmes y no forzó ni una sola acción de riesgo concreto para Agustín Rossi en medio partido.
Habían transcurrido cinco minutos del segundo tiempo sin mayores novedades cuando el colombiano Edwin Cardona colocó una muy buena pelota para el pique por derecha de Cristian Pavón y el ex Talleres de Córdoba la cruzó hacia el medio superando al arquero Alan Aguerre, cortó a medias Emiliano Amor y Benedetto, a quien el balón le había quedado detrás, resolvió con una pirueta, conectó de taco y estableció el 2-0.
Vélez siguió sumido en la impotencia, sin respuestas, golpeado, y sobre los 17 minutos, aprovechando una mala salida del fondo local, robó Benedetto, picó la pelota hacia la izquierda para la llegada de Cardona y Domínguez, en su desesperación por cortar, venció su propia valla.
Con el partido definido, Boca pudo haber llegado al cuarto a los 22 minutos, pero salvó Aguerre ante Cardona.
El cierre del marcador iba a llegar finalmente a los 40 minutos. La empezó y la terminó el colombiano Fabra, quien ganó por prepotencia ante Fabián Cubero, jugó con Agustín Bouzat, fue a buscar la devolución al área y definió con disparo a gol. El líder está a full.

Los secretos de la goleada
Paciencia y efectividad
Boca tuvo su gran chance a los 14" del comienzo del partido y no la dejó pasar. Abrió el marcador, desnudando los problemas que tenía el rival cuando lo atacaba rápido de contragolpe.
Esperó el momento y sumó
Vélez le creó problemas al puntero, porque le quitó pelota y terreno pero como no tuvo decisión en los metros finales no le creó problemas al arquero Xeneize. Y Boca, que esperó, sumó el segundo.
Con el partido en el bolsillo
Estaba claro que estratégicamente Boca ya tenía el partido en el bolsillo. Por eso no extrañó que sumara otros dos goles para redondear una goleada reconfortante ante un equipo al que no le habían hecho goles.
