Los pibes de Boca no se achicaron en el Sur, dieron la cara y se llevaron un puntazo histórico en la segunda fecha de la Liga Profesional. Los Juveniles de Sebastián Battaglia se le plantaron de igual a igual Banfield y el papel fue más que digno: salieron enchufados, manejaron la pelota con criterio, tuvieron varias oportunidades claras para ponerse en ventaja, corrieron hasta el último segundo y en la única llegada clara del equipo de Sanguinetti, el arquerito Lastra se lució y le tapó un tremendo cabezazo a quemarropa a Pons.
La primera del partido fue para el Xeneize: de arranque, Montes sacó un lindo remate desde la medialuna y la pelota pasó cerca del travesaño. Con un atrevido Barco por la banda izquierda y con Equi Fernández -metió un cañazo- manejando los hilos en el medio a pesar de jugar infiltrado por un fuerte esguince en el tobillo derecho, los chicos se animaron y Escalante y Vega encendieron las alarmas del arco del Taladro.
En el segundo tiempo, a pesar de que habían jugado hace poco más de 24 horas en Reserva, los pibes fueron incansables en una cancha muy pesada por la lluvia. Bodencer le quemó las manos a Altamirano y cuando el Taladro insinuó, Barco metió una tremenda corrida para evitar el gol de Cuero. Con el correr de los minutos llegaron los calambre, Battaglia movió el banco para tratar de meter piernas frescas y este Boca Kids (debutaron 13 chicos), que dejó todo hasta el último segundo, se fue del Florencio Sola con un empate inolvidable.

