En el último día de montaña y cuando las dudas se cernían sobre él, el colombiano Egan Bernal (INEOS), apoyado en su gran equipo, solventó la etapa reina con maestría y sentenció la carrera, mientras que el italiano Damiano Caruso, más valiente que nunca, se llevó la jornada tras un lejano ataque y consolidó su segundo puesto de la general.
Fue la etapa más vistosa de la carrera, con el francés Romain Bardet y Caruso poniendo en jaque la carrera, especialmente el transalpino, que se valió de Pello Bilbao para intentar dar un vuelco imposible a la general.
Nunca se puso nervioso Bernal, que tuvo en Jonathan Castroviejo y en Daniel Felipe Martínez a sus dos mejores gregarios, quienes nunca abandonaron a su líder, que saldrá hoy con 1 minuto con 59 segundos de ventaja sobre Caruso.
El Giro finalizará en las calles de Milán con una etapa contrarreloj de 30 kms. que debe coronar a Bernal y que supone otra gran oportunidad de triunfo para uno de sus compañeros de equipo, el italiano Filippo Ganna.