Pasó la desilusión por el descenso y el éxodo en Sportivo Desamparados fue tremendo. Un nombre que fue bandera se quedó para buscar la revancha y hoy es el máximo referente: Carlos Ariel Barth. Por lo que juega, por cómo entrena y también por su edad.

Con 35 años, el ex-defensor de Santamarina de Tandil es el más grande dentro del nuevo plantel puyutano. Lo escoltan el arquero Leonardo Avila (33 años), el defensor Alejandro Schiaparelli y el delantero Leonardo Abálsamo que con 32 años, respectivamente, arman el podio de los más grandes. En el polo opuesto, los más jóvenes del equipo de Andrés Villafañe son el arquero Germán Vicentella, Oscar Sainz y el delantero Matías Sen. Vicentella tiene 19 años y Sen 20, al igual que Sainz.

En la frontera de los 30 hay dos jugadores y ambos son refuerzos: Víctor Benítez y Alexis Salazar, volante y delantero respectivamente. Hay solo un futbolista con 29 años y es el arquero José Nicolás Mancinelli, quien llegó desde Rio Cuarto. Con 28 años se anota otro de los que llegó como refuerzo; Silvio Prieto.

En tanto que con 27 años se cuentan a Sebastián Malandra, Pablo Borchez y Santiago Ceballos. En la media que dicen es ideal en un jugador, los 26 años, hay varios nombres: Tomás Salinas, Gonzalo Gómez, Eduardo González y Martín Bidal. Con 25 años, los que se anotan son Emmanuel Campo, Julio Ibañez y Maximiliano Zbrun. En tanto que con 24 están Gerardo Corvalán y Franco Gizzi. Un grupo que mezcla experiencia y juventud.