Independiente encontró anoche los goles en el segundo tiempo para imponerse 2-0 sobre Banfield en el Estadio Libertadores de América y así seguir escalando en las posición tras el arribo a la conducción técnica de Cristian Diaz. De esta manera el Taladro llegará golpeado al choque del próximo viernes en el Sur de Buenos Aires frente al San Martín de Facundo Sava, que ayer tuvo un fuerte envión anímico.
En un primer tiempo muy aburrido, tan frío como la noche, Independiente no logró aprovechar ninguna de las ventajas que le concedió Banfield, que se atrincheró en las inmediaciones de su área y ni siquiera contraatacó en esos 45 minutos iniciales. De hecho, el local apenas arrimó a los 40, cuando el ingresado Pizzini tiró un centro cerrado, envenenado, que involuntariamente se habría metido en el ángulo derecho si Cristian Lucchetti no hubiera desviado el balón al córner. Inesperadamente, el propio Pizzini resultó ser el más desequilibrante del capítulo inicial, ya que a los 45 se metió al área por la derecha y Nicolás Tagliafico lo derribó con una clara infracción que no fue sancionada por el árbitro Saúl Laverni.
En el segundo período, Banfield intentó adelantarse y plantear su pelea en la mitad de la cancha, en tanto el anfitrión procuró acercar más sus líneas con el objetivo de abrir la cancha. Esto hizo que el trámite se tornara muy friccionado y desprolijo y en ese desorden terminó prevaleciendo la mayor jerarquía de los jugadores del Rojo. De todas maneras fue precisa la aparición desconcertante de la pegada de Ferreyra, quien abrió el marcador a los 25 minutos con un zurdazo espectacular que se metió en el ángulo superior derecho de Lucchetti. Una vez obtenida la ventaja todo se hizo más fácil para el local y a los 36 pudo ampliar la diferencia tras un tiro libre, otra vez gracias a la precisión de Ferreyra. El mediocampista envió un centro preciso al primer palo y Farías se anticipó a los marcadores para definir de cabeza al ángulo izquierdo, sentenciando la victoria. Con este resultado Banfield empeora notablemente su situación en la tabla de los Promedios.