Edificio de boxes. Uno de los frentes complejos de obra es la estructura que alojará boxes, frente a la recta principal. Avanzan a paso firme.

 

 

Hay 25 empresas, entre contratistas y subcontratistas, que trabajan en triple turno y el ritmo no se detiene en fines de semana ni feriados. El autódromo El Villicum no para de crecer y ya tiene casi 90% de avance de obra a poco más de 50 días para la fecha del Campeonato Mundial de Superbike, que se presentará en la inauguración. Es más, desde el Ministerio de Infraestructura anunciaron la fecha clave: el 30 de septiembre las empresas deberán entregar las llaves del complejo, para que entonces sólo tengan que realizar las diferentes pruebas técnicas de cara a la competencia que se desarrollará entre el 12 y 14 de octubre.

El autódromo que se construye a la vera de la ruta 40 tiene dos etapas. La primera finalizará precisamente el 30 de septiembre y es la que contempla todos los trabajos para la inauguración con el Superbike. La segunda incluye otros edificios y obras anexas, que estarán listos para noviembre con la presentación del Turismo Carretera, que volverá después de medio siglo.

 

Las tribunas. Con grandes grúas para colocar los bloques premoldeados, el nuevo autódromo ya tiene lugar para el público con las cinco tribunas, en diferentes partes del trazado.

En los últimos días y entre todos los frentes de trabajo que encaran a la vez, uno de los aspectos más destacados es la colocación de las tribunas, con material premoldeado. Se trata de cinco grandes estructuras, que para esta primera fase contemplará cuatro gradas para dos mil personas cada una y otra con capacidad para 1.500.

Una de ellas es la está sobre la zona de boxes; otra está hacia un extremo para apreciar la recta larga y zona de curvas finales; mientras que las otras tres van hacia el centro de la pista, aprovechando una lomada natural.

Los edificios de boxes, clínica médica, sala técnica y sanitarios prácticamente están terminados (utilizaron sistema de construcción en seco que acortó los tiempos), a la pista de 4,3 kilómetros de extensión le colocaron la última capa asfáltica, están instalando los últimos guardarrailes y finalizando los pianitos (delimitadores de curvas).

En las últimas semanas además ajustaron detalles en las camas de leca de las zonas de escape, pues los niveles y pendientes deben ser exactos debido a cuestiones de seguridad, de acuerdo a las visitas de inspección que realizaron tanto la Federación Internacional de Motociclismo (FIM) como la Federación Internacional de Automovilismo (FIA).

Con los trabajos de obra más grandes terminados o por concluir, seguirán con la compleja tarea de las diferentes instalaciones, de todos los servicios, desde los eléctricos hasta los de fibra óptica. Las distintas empresas en estas semanas irán entregando paulatinamente los aspectos que les toca afrontar y el 30 de septiembre todo deberá estar listo.

Entonces, el periodo posterior será para realizar las pruebas de funcionamiento de las instalaciones, para que cuando la primera moto del Superbike salga a pista el 12 de octubre todo esté perfecto.

Mientras tanto, a fin de mes le abrirán el autódromo a la organización de la categoría para que también empiece a trabajar en los aspectos técnicos vinculados a la estructura organizativa de la carrera.

 

En pista. La obra de parquización contrasta con los cerros en El Villicum, a la vez que ya están colocados casi todos los guardarrailes.

 

Personal

500 Personas trabajan en la obra de construcción del autódromo. Lo hacen en diferentes empresas, entre contratos y subcontratos, tanto de día como de noche.

Tribunas

9.500 Es la capacidad total de las cinco tribunas que están colocando en el circuito. Hay cuatro para 2.000 personas cada una y la restante, para 1.500 espectadores.