Lionel Messi es el mejor jugador del mundo, así lo marcó su temporada en el Barcelona, por eso recibió reconocimientos de propios y extraños y es el as de espadas que tiene preparado Diego Maradona para que de su mano pueda conducir al seleccionado argentino en el Mundial.
La estrella del Barcelona, salvo en esporádicas ocasiones, no pudo rendir en el seleccionado argentino en el nivel que muestra con regularidad en España.
Cuestiones de planteos de los diferentes entrenadores, pasando por José Pekerman, siguiendo por Alfio Basile y llegando a Maradona, también conspiraron para que Messi no sea el Messi del Barcelona.
Maradona sabe que con Messi tendrá una ventaja que puede ser clave, por eso lo puso con Juan Sebastián Verón en la habitación.
Lo que busca el entrenador del seleccionado argentino es que Verón lo aconseje y le transmita su pasión por la camiseta.
Si Messi está bien, las posibilidades de Argentina de salir campeón son más que grandes, porque él solo puede definir un partido cerrado, de esos que parecen no tener solución, como hacía Maradona en su época de jugador.
En estos días en Pretoria el cuerpo técnico argentino está tratando que todos sus dirigidos se sientan cómodos y distendidos, pero en especial el astro del Barcelona.
¿Dónde tiene que jugar Messi?
Expertos remarcan que Messi debía arrancar de derecha al medio y ahí establecer la diferencia.
Pero resulta que Guardiola en esta temporada lo dejó suelto, flotando muchas veces por el medio, siendo enlace o nueve casi de punta, y también marcó diferencia.
La clave para el juego de Messi estará en que pueda entrar en contacto con la pelota cerca del arco de rival y de frente al mismo.
Si Messi tiene que retroceder hasta la mitad de cancha para tomar la pelota, gambetear cinco jugadores y hacer todos los goles como el de Diego a los ingleses podrá destacarse pero no será lo desequilibrante que necesita el equipo.
En eso está trabajando Maradona, en generar sociedades entre Messi y Di María, Messi y Verón, Messi e Higuaín, para que desde esos encuentros el delantero de Barcelona tenga los espacios para desequilibrar.
Es cierto que el fútbol es ensayo, entrenamientos, pruebas, partidos y por cuestiones de calendario el seleccionado argentino no cuenta con nada de eso, pero hay cosas que se pueden arreglar y cuando hay talento todo es mucho más fácil. Y en este caso lo que sobra es talento.

