Arsenal de Sarandí, con dos goles de Luciano Leguizamón, cosechó su primera victoria en el torneo Apertura de fútbol, al vencer a Tigre por 2-1, en condición de visitante. El triunfo de Arsenal, legítimo, se explica a partir del desequilibrio permanente que provocó Leguizamón y el juego colectivo cohesionado del equipo. El conjunto orientado por Gustavo Alfaro manejó la pelota, la hizo circular con prolijidad y dominó con cierta comodidad. Tigre lució desconcertado en las primeras acciones y esa situación se agravó con la temprana apertura del marcador cuando Leguizamón capitalizó un error de la defensa y sacó un remate a la izquierda del arquero Daniel Islas, a los 10m. Seis minutos más tarde, otro grosero error del equipo local le permitió a Arsenal ampliar la ventaja. Mariano Echeverría falló en un despeje y Leguizamón, con una buena definición, volvió a vencer a Islas. Tigre tardó en reaccionar. En el segundo tiempo, Tigre apostó a un esquema más agresivo, con tres defensores en el fondo y una vocación ofensiva más definida. Sin jugar bien, el local logró el descuento a los 25m., producto del olfato de Stracqualursi.