Buenos Aires, 12 de septiembre.-Arsenal venció hoy a Tigre por
2-1 en un partido entretenido, en el que el conjunto de Sarandí
logró quebrar una racha de 10 partidos sin ganar en condición de
visitante, aprovechándose de un desorientado rival que siguió sufriendo bajas y no puede salir de un cono de sombras.

Matías Giménez, quien luego salió lesionado y difícilmente
llegue al choque con San Lorenzo de Almagro del martes próximo, abrió el marcador para los de Victoria a los 14 minutos de juego, pero en esa primera mitad Arsenal logró dar vuelta el encuentro a
través de Cristian Alvarez, a los 18, y Franco Jara, a los 32.

Tigre comenzó dominando pelota y terreno y a los 14 minutos
logró ponerse en ventaja a partir de un desborde de Giménez por la
izquierda, quien superó a Sergio Sena y sacó un disparo que doblegó
a Cristian Campestrini, quien, sorprendido porque esperaba un
centro, sólo alcanzó a tocar la pelota, pero sin llegar a impedir su
introcción en el arco.

Arsenal se recuperó enseguida e igualó aprovechando una
infracción que Guillermo Suárez le cometió a Iván Marcone. El tiro libre
lo ejecutó Alvarez por arriba de la barrera y el balón se metió
cerca del ángulo derecho del arco defendido por Lucas Ardente.

Hasta ese momento Tigre era más, pero siempre fue muy vertical
y demasiado previsible. Y Arsenal, que hasta entonces era sólo
peligroso de contragolpe, comenzó a tener más la pelota y a crecer
colectivamente, lastimando a la permeable defensa de Tigre con
pases profundos para Jara y Alexander Medina.

Maximiliano Oliva ingresó por el lesionado Juan Pablo Garat y
alternó como central con Rodolfo Arruabarrena. Pero la defensa
quedó desordenada.

Y sobre los 32 Julio Manzur y Oliva quedaron encimados a la
hora de despejar una pelota aérea sencilla. El primero resolvió mal
de cabeza y le dejó la pelota servida a Jara, quien eludió al
arquero y definió con clase para sellar el 2-1 parcial.

En la parte complementaria Arsenal especuló con la ventaja
conseguida y se paró de contragolpe, mientras Tigre iba en busca del
empate, apoyado en los buenos trabajos de Martín Morel y Lucas
Oviedo, aunque se sintió la ausencia de Matías Giménez, lesionado en
la primera parte.

La más clara tuvo lugar a los 4 minutos cuando Leandro Lázzaro
desniveló por izquierda y habilitó a Oviedo, quien perdió en el
mano a mano con Campestrini.

Después Tigre insistió, pero desordenadamente, y Arsenal
aguantó a pie firme sin pasar mayores sobresaltos.

i.