Buenos Aires, 10 de febrero.- El elenco capitaneado por Martín Jaite quedó a sólo un triunfo de acceder a los cuartos de final de la Davis y asegurar su permanencia para 2013 en un Grupo Mundial en el que tiene presencia ininterrumpida desde 2002. Argentina tendrá la posibilidad de conseguirlo en el partido de dobles que disputará mañana a partir de las 10 hora argentina en el estadio Stechert Arena de Bamberg.
En ese encuentro, en principio, se enfrentarían la dupla argentina conformada por Juan Ignacio Chela y Eduardo Schwank ante la alemana compuesta por Tommy Haas y Philipp Petzschner, aunque puede haber modificaciones de ambos lados si los capitanes así lo deciden. Fue Mónaco quien tuvo la responsabilidad de abrir la serie y lo hizo con una actuación superlativa ante un Petzschner que sólo le opuso resistencia en algunos pasajes del segundo y tercer set.
Durante el resto del encuentro no le opuso demasiada resistencia a un Mónaco filoso, preciso, que se quedó finalmente con el primer punto con un triple 6-3. Se adelantó rápido el tandilense en el primer parcial, con un 4-0 que echó por tierra cualquier expectativa inicial de Petzschner, quien intentó tibiamente volver al partido pero sus errores no forzados redujeron demasiado sus chances.
Por su parte, en segundo turno, Nalbandian protagonizó un partido poco habitual ante Mayer, ante quien se impuso con parciales de 2-6, 6-0, 6-1 y 7-6 (7-5) en dos horas y 32 minutos de juego.
La rareza a la que se hace mención derivó de los vaivenes que presentó el encuentro en el cual el cordobés supo sacar la mejor tajada en los momentos clave, por ejemplo, en el tie break del cuarto set, el más peleado de un encuentro que duró dos horas y 32 minutos. El alemán no le dio chances a Nalbandian en el inicio del partido y rápidamente se puso 4-0 arriba con dos quiebres que lo encaminaron hacia un triunfo parcial sin sobresaltos.
Sin embargo, la mejor versión del unquillense apareció en el segundo, cuando se quedó con el servicio del alemán en tres oportunidades para vapulearlo por 6-0, y en el tercero, cuando con dos rompimientos en base a un juego rápido y efectivo pudo adelantarse momentáneamente 2-1 en el partido.
El cuarto, en tanto, traería al rectángulo de juego la mayor paridad del partido, con un quiebre por lado y un tie break que parecía inclinarse rápidamente para el lado del argentino pero que terminó apretado.
Después de estar 6-1 en ese desempate Nalbandian desaprovechó cuatro puntos de partido, el último con revolcón en el polvo de ladrillo incluido tras tropezarse con una irregularidad de la superficie.
Pero la quinta chance finalmente fue la vencida, cuando con el alemán en levantada y con sus ropas color naranja producto de aquella caída, cerró el partido con un revés paralelo excelente.
De esta manera, Argentina puede cerrar mañana la serie ante Alemania, para continuar con el sueño todavía esquivo de poder ganar la Copa Davis.
