Un ataque de barras bravas de Racing a hinchas de Deportivo Cali causó pánico ayer por la tarde en la estación de Gerli del Tren Roca: se registraron seis heridos -todos de nacionalidad colombiana- por cortes. Uno de ellos, en estado grave.
El hecho estaría directamente vinculado al robo de una bandera: según informó el periodista Gustavo Grabia, la semana pasada, colombianos robaron un trapo del Cilindro, en la previa del duelo entre la Academia y Melgar por la Copa Sudamericana. Luego de que la barra de Deportivo Cali difundió un video en redes sociales, Los Pibes de Racing -como se conoce a la barra brava- juraron venganza.
El cruce a los hinchas del Cali se produjo, cuando estos se dirigían al ‘banderazo’ que organizo la barra colombiana en el Obelisco a las 19 horas. Por eso los enfrentamientos se produjeron cerca de las 18 horas y según varios testigos iban en el tren fueron momentos de extrema tensión. Se habla que los barras de Racing tenían en sus manos cuchillos, palos, botellas rotas utilizadas como puñales y piedras. A tal punto era la escena dantesca, que los violentos de la Academia le decían a los pasajeros que se fueran a los últimos vagones de la formación porque la idea no era robarles sino tomarse venganza de los hinchas de Cali. Algo que pudieron lograr, pese a que las autoridades de seguridad de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires hicieron un fuerte operativo de seguridad en el Obelisco. Es que, a priori, se suponía que en ese lugar emblemático era donde la barra de Racing iba a buscar reconquistar su bandera.
Pero Avellaneda transita momentos de máxima tensión con los dos clubes más populares. Es que Independiente, que anoche jugaba ante Ceará un partido clave para sus aspiraciones de clasificar a la próxima instancia de la Copa Sudamericana, también tuvo una jornada agitada por la violencia. En la previa se vio manchada debido a que la barra del Rojo volvió a protagonizar un hecho de violencia que terminó con heridos y detenidos.
A horas del decisivo partido, una de las facciones de la barra de Independiente generó disturbios en las inmediaciones del Estadio Libertadores de América y se enfrentó con la policía. De acuerdo con los testigos y algunas filmaciones, hubo piedrazos y balas de goma. Finalmente, los lamentables incidentes terminaron con dos efectivos heridos y, hasta el momento, 163 detenidos.
Cabe recordar que Independiente ya venía viviendo días convulsionados por la interna de la barra. Los Diablos Rojos, grupo encabezado por Bebote Álvarez, tiene la intención de retomar el control que hoy por hoy está en manos de dos grupos, Dueños de Avellaneda y Somos Nosotros.
Sin dudas, un cóctel explosivo que ayer tuvo dos episodios más que lamentables. Habrá que ver qué repercusiones y medidas se toman a futuro.