La ilusión mezcla colores. El superclásico argentino es una batalla de colores, cantos y color en las tribunas, siempre. En la Argentina o en México, donde se jugó el sábado y River festejó luego del 1-1 en el global y el 4-2 en los penales. Pero antes del partido, los dos equipos se juntaron y posaron con una bandera en celeste y blanco, con la inscripción “¡Vamos Argentina!”, junto a una imagen de la Copa del Mundo. Y nada menos que en el Azteca, donde Diego y compañía tocaron el cielo y levantaron el trofeo más deseado.
A 10 días para Brasil 2014, los dos clubes más populares de nuestro país se unieron en un pedido: queremos la Copa. Todos desean lo mismo y tiene un pedido en común: dar la vuelta en Brasil.

