El director técnico de Boca Juniors, Abel Alves, recibió ayer el respaldo a su gestión de parte de los principales directivos y ahora analiza implementar cambios para enfrentará a Rosario Central.

Antes de comenzar el entrenamiento ayer, el entrenador se reunió con el vicepresidente del club, José Beraldi, y con titular del departamento de fútbol profesional, Marcelo London.

Los dos directivos que quedaron al frente de ese departamento tras la renuncia del manager Carlos Bianchi, en marzo pasado, según expresaron a Télam fuentes vinculadas a la reunión, le expresaron a Alves el respaldo del presidente Jorge Amor Ameal y del resto de la comisión directiva.

Luego de la reunión que mantuvo en el complejo auriazul con los directivos, Alves salió a dirigir la práctica, que se realizó a puertas cerradas para socios y periodistas.

En tanto, los titulares sólo efectuaron ejercicios livianos en el gimnasio, mientras que Morel Rodríguez se sumó al grupo tras una lesión. En un principio, Alves hizo jugar al uruguayo Gunino, debido a que no se conoce con certeza si finalmente Muñoz, quien fue expulsado será suspendido por una fecha o no, porque en la planilla habría anotado a Barroso como el expulsado.

Al respecto, en Boca se supo que existen dos corrientes en la AFA, una que propugna que los fallos arbitrales deben ser inapelables y no se debe utilizar la tecnología para rectificar los fallos, y en el caso específico de Muñoz, se supo que el árbitro sí puede modificar un error en su planilla por "sustitución de identidad", ya que confundió a un jugador por otro.