El entrenador de River Plate, Matías Almeyda, no realizó ayer la práctica de fútbol y así se mantiene la incógnita en cuanto al equipo que el sábado próximo enfrentará a Patronato de Paraná, en el estadio de Colón de Santa Fe, a las 15 y no a las 16.10, como estaba programado, debido a un pedido de la Policía de Santa Fe por la anteúltima fecha del torneo de la B Nacional.
El técnico del actual líder debe reemplazar al lateral-volante uruguayo Carlos Sánchez, quien sufrió la fractura de la clavícula derecha en el último compromiso ante Boca Unidos (2-1), y además no podrá contar con el mediocampista venezolano César González, quien ni siquiera figura entre los concentrados.

En ese contexto, si bien no hubo tareas tácticas, se especula con que Leonardo Ponzio se correrá al sector derecho de la defensa como terminó jugando el domingo pasado, mientras que Martín Aguirre ingresaría en el medio.

No obstante, Almeyda tendría en mente ubicar a Lucas Ocampos en el sector izquierdo por donde habitualmente se desempeña González, quien ante Boca Unidos fue reemplazado por Daniel Villalva.

En consecuencia, el posible equipo que comenzaría a probar Almeyda desde hoy será con Daniel Vega; Leonardo Ponzio, Jonatan Maidana, Leandro González Pírez y Ramiro Funes Mori; Ezequiel Cirigliano, Martín Aguirre y Lucas Ocampos; Alejandro Domínguez, Fernando Cavenaghi y Trezeguet.

Ayer, el plantel se entrenó en el predio de Ezeiza a puertas cerradas y los trabajos con pelota se realizaron en espacios reducidos con la participación de 14 jugadores que no dieron cuenta de quiénes pueden ser titulares el fin de semana.

De estos trabajos, formaron parte tanto Ponzio -sufrió un episodio hemorroidal- como César González, quien ya recibió el alta médica tras una distensión muscular pero aún no es tenido en cuenta. Por su parte, los jugadores que realizaron tareas diferenciadas fueron Juan Manuel Díaz con pubialgia, Andrés Ríos con una fisura en el pie derecho y Nicolás Domingo con un esguince de tobillo derecho.