Está claro que ya es un clásico. Hay un dato que así lo marca: Argentina y España definieron seis de los últimos ocho mundiales, contando el choque de hoy en Luanda. Hasta ahora de los cinco cruces anteriores en el partido por el título, los europeos tienen una supremacía importante con cuatro vueltas olímpicas por su lado, contra una de la Albiceleste.
Justamente en Reus ‘99 se dio esta alegría para el equipo que por entonces dirigía Miguel Gómez y que representó el último título ecuménico para nuestro país. El mendocino Gabriel Cairo con su tanto en el primer tiempo de aquella final le dio la coronación a esa selección nacional, justo en tierras españolas. De ahí en adelante, España ejerció una auténtica hegemonía. La venganza de la Furia Roja llegó dos años después, en San Juan 2001. En un Aldo Cantoni repleto, España dejó en una ilusión el bicampeonato consecutivo y se impuso por penales, luego de igualar 2-2 en el tiempo reglamentario y el suplementario. Ese torneo marcó el final de la conducción técnica de Miguel Gómez en la Argentina.
Se volvieron a topar en una final en el 2005 en San José de California, Estados Unidos. El equipo conducido ya por Pablo Cairo cayó 2-1 contra España y así otra vez la alegría resultó ajena. Cuatro años más tarde, en Vigo ‘09, la definición los encontró nuevamente cara a cara. En lo que era el primer Mundial como técnico de la selección de José Martinazzo tampoco se pudo y España celebró un nuevo título merced al 3-1.
Con la vuelta de David Páez al seleccionado nacional luego de varios mundiales, Argentina encaró la misión de derrocar a España de la cima del mundo en el Mundial de hace dos años, nuevamente en nuestra provincia. Pero los ibéricos demostraron una vez más que eran los mejores. Con un arranque a toda orquesta simplificaron una final que terminó con un ajustado 5-4 para los visitantes, aunque en el trámite del partido las diferencias resultaron muy superiores.
Hoy, en Angola, Argentina buscará su quinto Mundial. Después de San Juan ‘78, Novara ‘84, Recife ‘95 y Reus ‘99. Lo intentará frente a su sombra negra en los últimos años. Una misión realmente dura, aunque para nada imposible.

