Bochornoso. Sebastián Driussi y Leonardo Ponzio sufren los efectos del gas pimienta que arrojó el "Panadero" Napolitano cuando los jugadores estaba en la manga. Fue un bochorno que quedó para la historia. 

Fue una de las noches más tristes del Superclásico argentino, que aún sigue latente y se replica en cantos y gastadas. Hoy se cumplen cinco años del Boca-River que se suspendió porque un hincha xeneize, antes de comenzar el segundo tiempo, tiró gas pimienta adentro de la manga por donde salían los jugadores de River, en un partido de octavos de final de la Copa Libertadores que separó a las dirigencias de los dos gigantes del fútbol argentino.

Como consecuencia inmediata, el equipo dirigido por Marcelo Gallardo ganó los puntos en el tribunal de disciplina de la Conmebol y pasó a los cuartos de final de la Copa Libertadores, en la que fue campeón. Ese episodio fue el comienzo de una profunda enemistad entre el presidente de River, Rodolfo D"Onofrio, y el ex titular de Boca, Daniel Angelici.

Fue el 14 de mayo de 2015 y las 50 mil personas que colmaron la Bombonera fueron testigos de una de las noches más tristes en ese místico estadio. Pasaron 5 años pero la memoria colectiva seguirá recordando al que se llama"el partido del gas pimienta".

"Fue una vergüenza para todo el mundo del fútbol. Y Boca sabía que era responsable"
MATÍAS PATANIAN

Ex vicepresidente de River Plate

Todavía hace ruido el inesperado ingreso del presidente de River al campo de juego: para los de Nuñez fue algo heroico, para los de la Ribera, y especialmente para Angelici, imperdonable. "Cada uno defendió los intereses de su club. El fútbol es una pasión y yo me he calentado en algunos momentos pero siempre fui respetuoso", dijo en las últimas horas Angelici.

"Aquella vez no me perdonó que entré a la cancha para defender a mis jugadores. Fui porque me avisaron que los jugadores podían tener una lesión grave en la vista. Bajé como un loco por las escaleras y me metí en la cancha a parar esa locura", dijo al respecto D"Onofrio el año pasado.

El encuentro era clave: desquite por los octavos de final de la Copa Libertadores, River venía de ganar como local por 1 a 0 con un gol de tiro penal de Carlos Sánchez, con un arbitraje de Germán Delfino repudiado por el "mundo Boca". El clima para la revancha era caliente.

La primera parte fue cerrada, casi sin situaciones de peligro en las áreas. Cuando los jugadores de River ingresaban para jugar el segundo tiempo, desde la tribuna de socios norte baja y a través de la manga de seguridad, el socio boquense Norberto "El Panadero" Napolitano lanzó el gas pimienta, como permitieron comprobar las cámaras de seguridad del estadio.

"El Panadero" estaba acompañado por Federico Blanco, Diego Blas Biglia y Gustavo Florentin, todos socios de Boca que luego fueron expulsados según resolvió la comisión directiva.

Como loco. Rodolfo D"Onofrio corre para intentar auxiliar a los jugadores. En Boca no le perdonaron esa acción. 

 

Ponzio, Matias Kraneviter, Lionel Vangioni, Ramiro Funes Mori, Jonatan Maidana, Sebastian Driussi y Fernando Cavenaghi se restregaban los ojos y la molestia en su vista fue observada por el árbitro Darío Herrera, mientras era rodeado por los jugadores locales.

D"Onofrio ingresó al campo de juego acompañado por el dirigente Matías Patanian para sacar a sus jugadores de la cancha. Eso motivó la reacción del técnico de Boca, Rodolfo Arruabarrena, quien increpó al presidente de River, mientras el veedor de la Conmebol, el boliviano Roger Bello, intentaba comunicarse con el jefe de esa entidad, Juan Angel Napout, después procesado por el "FIFA gate".

Luego de 70 minutos de deliberaciones y con todo el público que no se movía del estadio, Darío Herrera dio por suspendido el partido. Dos horas después, varios dirigentes de River viajaban de urgencia a Paraguay en un vuelo privado.

Escándalo. Marcelo Gallardo y Ponzio son los únicos que quedan de aquel partido. Así dejaba la cancha.

 

El final de la historia es conocido: el partido no se jugó nunca más y por resolución del tribunal de disciplina de la Conmebol, Boca perdió por 3 a 0 y tuvo que jugar sin público dos partidos de la Copa Libertadores.

"El Panadero" Napolitano fue declarado por la Justicia actor intelectual y material del ataque. Dueño de una panadería en Lomas de Zamora, socio de Boca y seguidor del equipo en todos lados, no tenía nada que ver con la barra brava.

Fue hace cinco años, pero todavía el hincha de River entona "el que no salta abandonó", y el de Boca responde "ay, ay, ay, te fuiste corriendo a Paraguay".

¿Y el Panadero?

Adrián "El Panadero" Napolitano zafó de prisión por lesiones agravadas gracias a una probation: lo condenaron a 3 años de trabajo comunitario en una iglesia. Además, debió donarle 100 kilos de pan a Cáritas y pagarle $25.000 a los jugadores de River. Quiere volver a la Bombonera, pero en Boca lo expulsaron de por vida.