El saliente director técnico de Boca Juniors, Carlos Ischia, dijo que se va "tranquilo" del club porque le dio todo y remarcó que "ya no tenía sentido continuar dirigiendo dos partidos más". En tanto, Ischia elogió a Alfio Basile, quien sería su sucesor, porque lo llamó telefónicamente "y ese gesto lo enaltece aún más".
"Me voy tranquilo, no me guardé nada. Di todo, lo máximo. De eso no me voy a arrepentir nunca. Lógicamente, errores hemos tenido y si no tuviéramos errores no seríamos humanos y me hago cargo de esos errores", expresó el destituido entrenador.
Ischia firmó su rescisión contractual, pues tenía un vínculo laboral que lo unía a Boca Juniors hasta el 31 de diciembre próximo, pero debido a los malos resultados futbolísticos debió irse del club.
Ayer, la práctica fue conducida por el técnico de la reserva, Abel Alves, en tanto el posible sucesor de Ischia sería Basile, aunque en las últimas reuniones que el manager Carlos Bianchi tuvo con el representante del entrenador Norberto Recassens, se "empantanaron", según comentaron fuentes de la entidad de la ribera.
Ischia se presentó en Casa Amarilla, donde reunió a los jugadores del plantel, a quienes les agradeció el apoyo recibido y luego retiró sus pertenencias y abandonó el predio auriazul.
"Me voy tranquilo porque le di todo a Boca, dejé de compartir momentos con mi familia por esta responsabilidad, porque un club como éste así lo exige y no me arrepiento. Tuve errores, como todos los seres humanos. Si a alguien le fallé, le pido disculpas", manifestó en diálogo con la prensa.
"Por como se dieron las cosas no tenía sentido continuar. Uno nunca quiere que las cosas terminen de esta manera, pero así es nuestra profesión. En el fútbol mandan los resultados, en el argentino y en todo el mundo", agregó.
"No me fui mal de Boca. Les agradezco a todo, le agradecí a Pedro (Pompilio, el presidente fallecido) que ya no está entre nosotros y fue quién me trajo y les agradecí a todos los que colaboraron con esta gestión", añadió.

