Está en la semana previa a una experiencia que le dejará una huella en su vida. Y no sólo deportiva. ‘Siento que le hice ‘track’ al calendario’, fue una de las tantas frases que usó para describirse en este momento. Henry Martín partirá hoy a Portugal, donde a partir del sábado comenzarán las actividades de las ‘Grand Finals’ de karting, el equivalente a un mundial, con la final disputándose el 1 de diciembre. El sanjuanino, que competirá entre los D2 Master, estará por primera vez en este acontecimiento deportivo. Debutó el 16 de abril de 1978 en una carrera de karting y recordó una vez más por qué está tan movilizado: ‘Cuando tenía 15 años, corrí con Ayrton (Senna) en Uruguay (NdR: 1980). Le peleé al que venía de ser subcampeón del mundo en los grandes y yo todavía podía ir a correr con los chicos. Pero no se pudo y fue como una astilla clavada. Ahora voy a responder una pregunta que tuve por 32 años. Es difícil de explicar lo que siento’.

-¿Cómo fue que volviste al karting?

-A principio de año padecí una neumonía que me costó mucho recuperarme. Tras la fecha de Olavarría en Top Race, caí otra vez en cama toda la semana. Y el sábado los chicos del equipo, con los que tenía asumido algunos compromisos, me mandaron unos mensajes por teléfono desde una carrera de karting (del campeonato de Buenos Aires). Entonces quise correr y me dijeron que no, que me recuperara. Llamé a los de la categoría y conseguí la inscripción. El domingo a la mañana, quedé tercero en el entrenamiento y gané la prefinal. Daba cuatro vueltas y me moría, me quedaba sin aire. Y a la final la gané en la última vuelta.

-Fue como una inyección de entusiasmo.

-Tenía en la cabeza a varios diciendo que dejara de correr, que lo de Falaschi, que hasta cuando. Medio que la cosa iba por ese lado. Volví de repente y gané la carrera, con un roce de por medio, hubo quilombo. Lloré como loco de la emoción. Volver a la actividad después de tanto tiempo era muy fuerte.

-¿Y ahí mismo ya pensaste en buscar la clasificación a las Grand Finals?

-Sí, me embalé y me di cuenta que era factible ganar el premio. Pasó a ser mi objetivo principal de esta temporada. Hice todo lo que tenía que hacer. Correr, entrenar, invertir plata. Lo busqué y me esforcé.

-¿Cuál es el objetivo deportivo?

-El máximo es escuchar el Himno Argentino en el podio. Pero estar en la final es en este momento el prioritario. Hay 60 inscriptos y a la final la corren 36.

-Cuando participaste en la competencia que fue en el mismo kartódromo y terminaste tercero fue un buen parámetro para pensar que vas a estar en la final.

-Están las contingencias de la carrera. Tenés un problema en el auto, no clasificás y largás siempre último en las mangas. Pero lo vivo con muchas satisfacciones y emoción. La concreción de este sueño no es solamente mío, sino de mi familia. Mis tres hermanas iban siempre detrás de mí. La mayor, vendió un ciclomotor que usaba para ir a trabajar para que yo tuviera un motor nuevo de karting. Hoy, con mis sobrinos, mi mujer e hijos también me acompañan en esto. Y es un premio para mis viejos, que tanto se esforzaron. Hoy, la salud de mi viejo es crítica pero por lo menos le pude decir: ‘Papá, me voy a poder ir a correr un mundial’.