– Otro Mundial más para vos, ¿cómo se siente eso?

– Como sentí los otros cinco Mundiales que jugué. De la misma manera y con el mismo entusiasmo. Con ganas de trabajar y con la ilusión de intentar ser campeón del mundo.

– ¿Cuál fue el primer Mundial que jugaste?

– El del "97. En Wuppertal, Alemania. Y después jugué hasta el de Suiza "07.

– Si hacés un paralelo de aquel año del debut y el actual, ¿qué decís?

– Que han pasado muchos años. Estoy más maduro que hace 16 años. He mejorado muchas cosas pero también he perdido otras. Lo importante es que mantengo la ilusión viva.

– Este plantel es una transición en cuanto a jugadores, ¿cómo lo ves?

– Nos hemos adaptado bastante bien entre nosotros. Con la serie de problemas que ha habido nos hemos hecho más fuerte como grupo. Hay una gran unión entre jugadores y cuerpo técnico y eso es esencial.

– Estos problemas a los que te referís son los de nunca acabar, ¿cierto?

– Creo que todo va a cambiar el día que nosotros, los jugadores, y lo exjugadores que quieran defender a los actuales, seamos un grupo fuerte. Si no nos unimos, los dirigentes van a seguir manejando el hockey y manejando a los jugadores.

– ¿Por qué? ¿En qué los perjudica a ustedes?

– Te afecta antes de una competencia importante, porque te estás comiendo problemas que no son de nosotros. Somos jugadores que tenemos que disfrutar, jugar y sacrificarnos dentro de la cancha.

– ¿Cómo vive hoy un tipo como vos que integró el súper profesionalismo del Barcelona?

– Y sigo en un equipo súper profesional como el Benfica de Portugal. Es verdad que el presupuesto del Benfica no es el mismo que el del Barcelona, pero hoy por hoy el Benfica es el actual campeón de Europa, entonces algo tienen que estar haciendo bien.

– Y el Carlos López de la familia, ¿ha cambiado en algo?

– Está claro que el apoyo de la familia es fundamental para estar en el Mundial. Al principio, con mi mujer nos costó mucho tomar la decisión que jugara en Angola, pero lo hicimos y ahora hay que pensar en lo que viene.

– ¿Estar de nuevo en la Selección es como una revancha para vos?

– No sé si definirlo como revancha, pero me jodió mucho no haber estado en los últimos dos Mundiales. Creo que por lo menos podría haber estado en la Preselección.

– ¿Para qué está Argentina en el Mundial en Angola?

– Para candidato a campeón. Reconozco que hay grandes potencias, como siempre, pero me tengo una fe bárbara. A España, Portugal e Italia no los podés discutir como candidatos. Portugal, por ejemplo, está hoy por hoy un poquito más fuerte que los otros. España está cambiando su gente y si bien tiene una base parecida hay recambio. Pero nosotros estamos unidos a morir.

– ¿Y las sorpresas?

– Lo de Mozambique en el Mundial de acá, en el 2011, fue más carambola que otra cosa. Pero ahora saldrá otro. Angola es local y hace dos años que se viene preparando para esto. Encima estará con su gente que apoya mucho. Consiguió nacionalizar al Negro Martín Payero que les aporta un montón y los portugueses que tienen están jugando en un gran nivel en Portugal.

– ¿Y otros?

– Los franceses también serán complicados. Han llevado jugadores en los últimos años de España, Portugal, Italia y Argentina para jugar en su Liga y han ido mejorando su nivel. Seguramente nos van a poner las cosas difíciles.

– ¿Cómo te ves el 28 de septiembre en la noche de Angola cuando ya haya terminado el Mundial?

– Me veo el 30 o el primero de octubre con la Copa aquí en San Juan. No se me pasa ni a mí, ni a otro de los muchachos de este grupo, otra cosa que eso.