-Llegaste para dirigir la local y ahora te encontrás siendo líder del Federal B. ¿Esperabas un arranque así?
-Yo siempre seguía a Alianza en las campañas anteriores y siempre hacía planes a futuro para, cuando me tocara a mí estar dirigiendo, no venir desprevenido. Siempre pensaba la cantidad de jugadores de buen pie que había acá y que no los explotaban como debía ser, el día que me tocó tomar las riendas ya venía con una idea clara de cómo quería que jugaran y los jugadores que había lo podían hacer tranquilamente.
-¿Siempre te imaginaste que ibas a llegar?
-Yo soy hincha de Alianza y estuve ligado siempre al fútbol. Sabía que me iba a tocar en algún momento. Gracias a Dios cuando me convocó Roberto (Mallea, el presidente) a él le gustó mi idea. Hace cuatro meses que estoy acá y los frutos los estamos consiguiendo. Igual esto es un camino largo, yo considero que es un proceso a tres o cuatro años para poner al club donde uno quiere.
-¿Se le apunta al ascenso?
-Uno siempre quiere ganar, yo cuando jugaba no me gustaba perder ni en el fútbol tenis, pero hay que ser concientes. No vale de nada ascender este año y pegar la vuelta el año que viene con una deuda grande embargando al club. La estructura futbolística e institucional hay que construirla para poder ascender y no bajar más. Hay que saber planificar, no crear deudas e ir cumpliendo objetivos a corto, mediano y largo plazo.
-¿Cómo fueron tus inicios como jugador?
-Tengo que hacer un poco de memoria. Hice las Inferiores en el Club Sarmiento, a los 18 años debuté en Primera en un Torneo Beccar Varela. A Sarmiento le tocó jugar con Capital en cancha de San Martín. Ganamos y gracias a Dios tuve un buen partido, por eso Meritello se fijó en mí para que llegara a Alianza. Estuve trece temporadas acá.
-¿Qué fue lo más importante que lograste?
-Un ascenso al Argentino A que ganamos ampliamente en una liguilla que se hizo junto a Trinidad, Unión y Sportivo. Yo siempre fui hincha de Alianza desde muy pequeño. Me acuerdo que ponía la radio y escuchaba los partidos, cumplí un sueño cuando vine a jugar. Pasé los mejores años de mi vida acá.
-Y tu otra profesión, ¿cómo la llevas?
-Trabajo de 8 a 15 horas de lunes a viernes (es docente de la Escuela Agrotécnica Sarmiento en Secundaria siendo Administrador de Red e Informática). Salgo de ahí y me vengo rápidamente al entrenamiento.
-¿Y cómo te repartís?
-Con mi familia estoy recién a las siete u ocho de la tarde cuando llego de los entrenamientos. Más de uno puede pensar que es una locura tener una rutina así, pero para mí el fútbol y Alianza es mi cable a tierra. Este club es mi casa.
-¿De qué forma te definís fuera del fútbol?
-Soy muy familiero. En los momentos libres, tratamos de ir al cine, pasear. Comer asados con amigos y hacemos competencias de karaoke. ¿Cómo canto? Me dicen que soy "bozarron". Es para divertirse y disfrutar de la vida.