Su pasado en Godoy Cruz. Su presente en San Martín. Dos motivos más que válidos para que una de las piezas claves de este Verdinegro, cómodo líder de la B Nacional, haya pensando desde varias fechas atrás en el partido del lunes 30, en Mendoza, ante nada menos que el Independiente Rivadavia de Teté Quiroz. El autor del gol del triunfo ante los tucumanos el viernes, que permitió que el equipo imponga la mejor marca del club en una rueda con 36 puntos, reveló que es uno de los partidos "que jamás quiere perderse". Por eso el volante, de 28 años, describió que desde que sumó su cuarta amarilla (ante Unión, hace tres partidos) trató de ‘evitar’ la quinta para así estar presente en el Parque mendocino. Por la forma en que habla, hasta podría decirse que estaba más contento porque no fue amonestado ante el santo tucumano, que haber convertido el gol de la victoria. Además, contó que con su padre, Luis, fanático de la Lepra, habrá apuesta de un asado a manos del ganador. Algo que ocurrió la temporada pasada cuando Torresi enfrentó a Independiente con el Verdinegro y los visitantes se impusieron 2-0 en Concepción.
-¿Cómo tomás el partido de la próxima fecha ante Independiente?, ¿es especial para vos?
-Muy especial. Desde que me sacaron la cuarta amarilla hace como un mes que ya pienso en el clásico. No digo que si hubiera tenido que meter la pierna no lo hubiera hecho aunque me costara la suspensión por cinco amarillas, pero igual traté de cuidarme porque es un partido imperdible.
-¿Es el rival menos querido para vos?
-Es el rival con el que siempre quiero jugar. Por mi pasado en Godoy Cruz y todo lo que representa para mí. Me quedé con la espina clavada el torneo pasado y quiero que la historia ahora sea distinta.
-A lo largo de tu carrera, ¿cuál es el saldo de los partidos ante ellos?
-Creo que jugué tres veces en total. Las dos primeras fueron cuando estaba arrancando en la Primera de Godoy Cruz y recuerdo que ganamos uno y casi los mandamos al descenso. En el otro partido empatamos. Y en la temporada pasada nos tocó perder.
-¿En la familia hay apuestas con alguien?
-Con mi papá, Luis, que es ‘leproso’ con ganas (sonríe). Cada vez que jugamos en contra, apostamos un asado. La última vez tuve que pagar yo, pero ahora espero que sea él quien tenga que sacar la plata del bolsillo.
Torresi estuvo más de 15 años, dividido en dos etapas, en Godoy Cruz. Y aunque por el lado de los hinchas de San Martín muchas veces toman a su clásico rival como el Tomba, la pica entre sanjuaninos y mendocinos siempre está latente. Algo que quedó de manifiesto la campaña anterior cuando en la previa del choque en Mendoza, el jugador de San Martín, Raúl Antuña, puso algo de dudas sobre el arbitraje para ese juego y la dirigencia verdinegra decidió separarlo del equipo para desactivar cualquier problema de seguridad.
Para cerrar, Mariano dejó su anhelo.
-¿Quién gana?
-Ojalá que nosotros, porque lo disfrutaría el doble.