La Selección de Nueva Zelanda inauguró su Copa del Mundo de rugby con una clara victoria sobre Tonga, por 41-10, en el partido disputado en un abarrotado estadio Eden Park de Auckland. Los All Blacks, que pretenden terminar con el maleficio en esta competición, que no ganan desde la primera edición en 1987, no tuvieron problemas para deshacerse de su rival oceánico, aunque por momentos dejaron entrever deficiencias que deberá corregir en los partidos más exigentes.

No tardaron los “kiwis” en refrendar su superioridad. Un golpe de castigo transformado por Daniel Carter a los cinco minutos abrió el festival para algarabía del público que llenó el estadio y que nunca dejó de alentar a su equipo. Luego dos tries de Israel Dagg y otros dos de Richard Kahui, más las tres conversiones de Carter elevaron el resultado a un contundente 29-0 que, con un postrero golpe de castigo de Kurt Morath se convirtió 29-3, con lo que se fueron al termino del primer tiempo. En la reanudación Tonga, con el choque perdido, echó mano de su orgullo para no salir vapuleado de manera escandalosa de Eden Park y frenó a All Blacks, cuyos errores le impidieron obtener un marcador más amplio. Aunque Jerome Kaino, con un nuevo try, amplió la cuenta.

Un robo de balón de Alisona Taumalolo dio paso a un ataque eterno de Tonga y a una defensa casi agónica de los “kiwis”, que tras más de diez minutos conteniendo casi en la línea de marca no pudieron evitar el único try de los visitantes, obra del propio Taumalolo, para festejo de su reducido número de seguidores que llegó hasta el estadio.

Los All Blacks asumieron el golpe y cerraron el encuentro con un brillante try, de manual, de Ma’a Nonu, convertido por Colin Slade, para firmar el definitivo 41-10.

Con este triunfo en el primer partido, Nueva Zelanda lidera el grupo A con cinco puntos a la espera de que hoy Francia se mida a Japón en el segundo partido de la serie.

Si bien fue un debut con muchos nervios para Nueva Zelanda, cumplió con la obligación de tener que ganar. Ahora deberá concentrarse en su segundo rival del grupo, Japón.