– ¿Tu vida debe ser ahora un poco más ocupada?

– Sí, ha cambiado un montón desde que me casé. La verdad que nada que ver. Mi mamá me tenía la comida lista, todo preparado. El auto para salir a entrenar. Y ahora eso cambió. Tengo que hacerme todo yo. Decí que mi marido me ayuda un poco con las cosas de la casa.

– ¿Vivís lejos de tu casa materna?

– Bastante, porque nosotros estamos en el centro y mis papis viven en Rawson. Pero estoy bien. Contenta. Aunque a todo le falta. Por ejemplo, todavía hay albañiles trabajando y es un lío.

– ¿Vos además trabajás fuera de casa?

– Sí, en el Ministerio de Infraestructura.

– No te pregunté quien es tu marido…

– Se llama Juan Sebastián Soler. Y él también trabaja un montón.

– ¿Coinciden en los horarios?

– Algunas veces. Él trabaja mañana y tarde, entonces nos vemos en el almuerzo y después por la noche.

– ¿Qué te llevó a esto de volver al hockey? porque vos ya habías largado…

– Sí, largué, pero ahora estoy de vuelta. Uno siempre tiene esa motivación especial y ganas por jugar un Mundial con la Selección argentina. Y como Jorge (Otiñano) me llamó, me citó a entrenar y me propuso un plan de entrenamiento a largo plazo, me gustó la idea y acá estoy.

– ¿Incide eso de no haber jugado en toda la temporada?

– Sí, tiene que ver con todo. Me siento muy lenta. Igual, una se pone el equipo, se mete en el arco y no se olvida de lo que aprendió. Es como andar en bicicleta para cualquiera. No te olvidás. Tal vez no reaccionás de la misma manera. Sos más lenta. Pero eso lo iré mejorando con el tiempo.

– Cuando te decidiste a volver, ¿todos te apoyaron?

– Sí, todos. Cuando hablé con el Negro (Otiñano) le aclaré que lo iba a hablar con mi esposo porque ahora yo no tomo sola las decisiones. Por suerte me dijo no tenía problemas.

– ¿Cuántos años tenés?

– 26.

– ¿Todavía no llevás un año de casada?

– Para nada. Me casé en noviembre del año pasado.

– Más o menos cuando el Flaco José Luis Gioja tuvo el accidente…

– Como un mes después. Cuando yo me casé ya estaba en Buenos Aires y se le notaba una mejora. Es más, todos estábamos más tranquilos.

– ¿Repercutió mucho en toda la familia aquel accidente?

– Muchísimo diría. Fue muy duro para todos nosotros. Mi papá (el intendente de Rawson, Juan Carlos Gioja), especialmente, estuvo muy afectado con la situación. Hasta físicamente. Fue una experiencia muy triste para todos, pero por suerte salió bien y ya está recuperado.

– ¿Te dolió no ir al Mundial de Brasil en el 2012?

– Ahora, con el paso del tiempo, me doy cuenta que realmente decidí largar el hockey porque sentía una gran decepción. Me sentí dolida con el hockey. No con alguien en particular. Sí sentí que fue una tremenda injusticia para nosotras. De ser campeonas, de venir de varios procesos seguidos y que después no nos quieran llevar por un problema dirigencial, eso mata a cualquiera.

– ¿Y este año vas a jugar acá?

– No voy a volver a jugar en algún equipo. Sólo lo haré en la Selección. Me van a hacer un plan de trabajo en el que tendré actividad dos veces por semana hasta el Mundial.

– ¿En Francia será difícil?

– Todos los Mundiales son complicados, pero como dijo Jorge (Otiñano), Argentina va al Mundial a ser campeón…