El capitán de Independiente, Daniel “Rolfi” Montenegro, asumió ayer la responsabilidad del plantel por el crítico momento deportivo que lo tiene al filo del descenso a la Primera B Nacional, al asegurar que los jugadores se hacen “cargo de todo”.

El mediocampista admitió “dolor” después de la derrota con River pero aclaró que “hasta que las matemáticas no digan lo contrario” el equipo “va a seguir peleando” como lo hizo en el Monumental.

“El dolor y la bronca se irá cuando pase todo esto. Hoy somos nosotros los encargados de sacar las cosas adelante pero la situación actual no es por un partido, por eso creo que no hay mucho que reprocharle a este equipo”, consideró.

“Los resultados marcan la realidad de este momento que es difícil. Lo que nos fortalece es la sensación de que este equipo pelea y sale a ganar en la cancha que sea. Más no se puede pedir”, valoró.