El zaguero de Estudiantes de La Plata, Leandro Desábato, admitió que "en lo personal me dio vergüenza" haber protagonizado el incidente al final del cotejo de ante noche ante el Inter de Porto Alegre, los que quedaron registrados en las imágenes televisivas. "En lo personal me dio vergüenza, más allá que el comienzo de este episodio, a mi entender, lo termina generando un jugador de ellos que se va a festejar con la gente de Estudiantes y va corriendo veinte o treinta metros haciéndole gestos a la platea", señaló.

Desábato dejó así testimonio en cuanto a que todo arrancó, luego de consumada la eliminación de su equipo de la Copa Libertadores de América, a raíz del festejo del arquero Roberto Abbondanzieri.

"Justo en ese momento me encontró a mí en cuclillas y yo le digo "pará, andá a festejar con tu gente", lo insulto ahí, él me empuja, yo lo empujo, me agarró del cuello, me separan y fue cuando un jugador de ellos -el arquero suplente Lauro- me agredió. Lo que se ve en imágenes", refirió el Chavo.

Un mortificado Desábato, dijo en diálogo con los periodistas de la FM La Redonda que "creo que lo mío fue lamentable, pegándole un cabezazo a Abbondanzieri. Bochornoso. Uno no trata de justificarse, sino que debe tratar que ello no vuelva a repetirse. Es difícil de explicar a aquella gente que lo vio desde afuera, pero las pulsaciones en ese momento van a mil, nos jugábamos todo, era una final, y justo cuando nos quedamos afuera pase un jugador haciendo señas y vaya festejando y, cuando se cruzó conmigo eso me sacó de los cabales".

El defensor reconoció que lo sucedido en cancha de Quilmes "no es buena la imagen que le deja al club, y la imagen mía es bochornosa".

Desábato insistió en cuanto a que fue el arquero titular del Inter el que "generó todo", y que "él mismo lo reconoció", tras lo cual le recriminó que "fuera a festejar con su gente" y le lanzó un insulto. Esto generó algunos empujones "y todo pudo haber quedado ahí, pero ahí vino el arquero suplente y me pegó. Reacciono, voy tras él, no lo encuentro, y justo me lo cruzo al Pato y le tiro un cabezazo porque el que había promovido todo era él", remarcó.

Sobre el partido, que se resolvió sobre el final con el gol de Giuliano que le dio el pasaporte al Inter a cuartos de final, por el valor que tiene la conquista de visitante en esta competencia, Desábato comentó que "era un partido que, desde adentro, se veía controlado; no teníamos un rival que nos dominara y nos pegara tiros en los palos y que en cualquier momento llegara al gol".

"Me pareció que era un partido que se iba con el correr de los minutos, y eso no quiere decir que nos confiamos, obviamente que cuando hay un gol hay errores, y nos duele de la manera que se dio. Si lo hubieran hecho a los 20 minutos no nos hubiera dolido tanto porque habríamos salido a buscar el partido, pero de esta manera no nos dio tiempo. Y esto nos sucedió tanto de visitante como de local", agregó.

Consultado sobre si la doble competencia fue una carga pesada que finalmente dejó sin nada a Estudiantes tanto en la Copa como en el torneo Clausura, en donde cedió al final ante Argentinos, el zaguero afirmó que "son opiniones que conducen a un debate".

"Seguramente si habría existido recambio hubieran jugado algunos partidos otros jugadores, no siempre los mismos. Siempre existen esos pequeños detalles. Lo que sí es que nos faltó muy poco. Con el Inter fueron partidos muy parejos. Lo que puedo decir es que nada garantiza nada. Vélez y Banfield se tiraron a la Copa y no les dio resultado y quedaron lejos en el campeonato", añadió.