Un joven de 27 años que está sin trabajo, fue apresado el miércoles pasado alrededor de la 1,30, luego de que la joven con la que estuvo en pareja en los últimos 10 años, lo denunciara, señalándolo como posible autor de graves ataques sexuales contra los hijos de ambos, una nena de 4 años y un varón de 7. Para el fiscal, Eduardo Gallastegui, y la ayudante fiscal, Rosana Riveros (UFI Anivi), el joven debía quedar preso porque consideraron que pudo violar a ambos menores. Y ante la posibilidad de que pueda influir a los niños para cambiar su versión antes de que sean entrevistados con el sistema de Cámara Gesell, pidieron que le dictaran 3 meses de prisión preventiva. La jueza de Garantías, Flavia Gabriela Allende, le imputó el delito enrostrado por Fiscalía, abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo, pero accedió al planteo en subsidio del defensor Claudio Vera, quien pidió la libertad de su cliente o, en todo caso, 30 días de encierro preventivo en una comisaría, tal como resolvió la magistrada.
"(Ella) hizo esto (la denuncia) porque yo me fui de la casa, yo me quise separar pero ella no me dejó. Yo no me escondí ni hice nada grave, soy inocente", dijo el joven cuando le informaron que podía dar su versión o negarse a hacerlo.
El hecho fue denunciado por la madre de los menores el pasado 7 de febrero. Según la mujer, ese día los niños se bañaban en la pileta de su casa en Chimbas, cuando la menor partió con su padre hacia la cocina comedor, con la intención de que él le pusiera dibujitos en una notebook. Al ver que se demoraban fue hasta el lugar y allí vio como el joven manipulaba el aparato con una mano, mientras la otra la tenía en la entrepierna de la nena. Hasta habló de introducción de un dedo, que la niña le dijo que no era la primera vez que la tocaba de esa forma y que también se lo había hecho a su hermanito. Según la denuncia, cuando la joven interrogó al niño si había sido atacado sexualmente por su padre, sólo se puso a llorar sin decirle nada.
Fiscalía pidió que ambos niños aporten su versión de los hechos ante psicólogos en una audiencia videograbada. A partir de la versión de ambos menores se podrá conocer si fueron o no víctimas de graves abusos sexuales. También por los informes médicos de ambos, cuyos detalles no fueron dados a conocer en la audiencia en la que se ordenó que su padre siga preso.