Nada pudo ser peor. Mientras en los despachos de Barrick en Canadá se entregaba el último informe sobre la viabilidad de Lama, en el Congreso argentino volvían a darle una cachetada a la actividad con otro cambio de reglas de juego gracias a la maravillosa idea de reinstalar las retenciones a la actividad minera. Para colmo tres diputados nacionales por San Juan, una de las provincias que más se benefició con la minería, apoyaban el proyecto de Sergio Massa, del impresentable de Axel Kicillof, y del PJ, liderado por el sanjuanino José Luis Gioja.

De recibir la otra media sanción, el costo de esta ley para la provincia será casi incalculable, porque se habla de la ampliación o no de dos minas en marcha, como Gualcamayo y Casposo, y el freno de todas las exploraciones e inversiones que se habían anunciado este año. No hay que olvidar que entre esas dos minas más Veladero y las caleras, estamos hablando de una actividad que genera más de 600 millones de dólares cada año, es decir, casi 10 mil millones de pesos a cambio de estos días. Hay una leve esperanza de que pateen la sesión del martes que viene en Senadores para otro año, u otra vida, que sería lo ideal. Hay tres senadores por San Juan, uno ya dijo que rechazará el proyecto y los otros dos se hacen de rogar, veremos qué pasa esta semana. 

 

El argumento de José Luis Gioja y Daniela Castro es al menos llamativo: que la tendencia era irreversible, y que con su voto no iban a torcer la opinión del resto del cuerpo. Menos mal que no estaban votando por sacar a San Juan del mapa argentino, porque si la tendencia indicaba aprobación, por ejemplo, nos sacaban del mapa y con el apoyo de tres sanjuaninos. Una locura. Después se abstuvieron en la votación en particular en los artículos respecto de las retenciones, pero ya habían contribuido al drama todo lo que pudieron. Es una estupidez pensar que iban a lograr algo con esa estrategia, y sinceramente creo que fue algo armado para intentar esconder la maniobra central. Llama la atención la posición de Gioja, una especie de padre de la minería sanjuanina. Una de las críticas más fuertes del exgobernador a sus examigos kirchneristas, principalmente al cristinismo, fue la falta de seguridad jurídica, a la que él, un año después de dejar la gobernación, vuelve a apostar. "Soy el presidente del principal partido de oposición", suele contestar el exmandatario cuando se le requiere una explicación de sus votos no convenientes para la provincia. Es cierto, tiene cierta responsabilidad política a la que obedecer, pero entonces que elija: ¿qué es más importante, la Presidencia del PJ o defender a los sanjuaninos en la Cámara de Diputados de la Nación? Si eso que él dice es cierto, que puede serlo, entonces hemos perdido un legislador. Yo prefiero al Gioja que se jugó la vida por los sanjuaninos y no a éste, que en cada voto se rifa la vida de los sanjuaninos en nombre del peronismo y su rol opositor. 

La otra que apoyó este desastre fue Florecia Peñaloza, quien pertenece al bloque de Massa. Peñaloza privilegió mantener el paraguas de la buena relación con el massismo, a los intereses de los sanjuaninos, eso está claro, ya que no hay forma de argumentar que este proyecto es bueno para San Juan. Primero que nada, hay que aclarar que de toda la plata que se le saque a la actividad por retenciones, nada volverá, porque las retenciones no son coparticipables, la Nación se queda con el cien por ciento. Las otras dos herramientas para tapar el hueco de recaudar menos recursos al mover el piso de Ganancias como dispone la iniciativa de Massa, el PJ y los impresentables K, es la de la renta financiera y el juego. La primera es muy fácil de esquivar, porque si los impuestos se pagan a partir del millón y medio de pesos puesto en plazo fijo, por ejemplo, la gente se pondrá ese límite y el excedente irá a otro tipo de ahorro, como puede ser la compra de dólares, u otra. Y lo del juego es lo único que se puede rescatar, ya que se trata de un reclamo histórico. Por este proyecto las apuestas online pagarían un 7.5% de impuestos, mientras que las máquinas un 10%. Igual, con eso no se tapa el déficit de más de $65.000 millones que, se calcula, ocasionará la parodia votada en diputados.  

En San Juan hay mucho más en riesgo: la mina Casposo revivió con 9 millones de dólares de inversión y Gualcamayo amplió este año en más de 60 millones de pesos su apuesta en exploración, todo gracias al anuncio de la eliminación de las retenciones mineras. Si las retenciones vuelven es probable que las empresas decidan no apostar. No hay que olvidar tampoco que el precio internacional del oro ha tenido una racha en baja, tras varios meses de alza. ¿Qué genera la minería en San Juan por año? Veladero, 396 millones de dólares; y sueldos por más de 800 millones de pesos. Gualcamayo, 81 millones de dólares; y más de 500 millones de pesos en sueldos. Y Casposo, más de 42 millones de dólares en movimiento; con 190 millones de pesos en sueldos. No hay que olvidar que la minería no metalífera, más que nada las cales, han generado el año pasado movimientos por 60 millones de dólares. 

Las empresas ampliaron cuando Macri anunció la quita de retenciones, por tanto es muy probable que ahora dejen de ampliarse, con lo que San Juan perderá esos valores cada año que las empresas no trabajen. Pero la principal preocupación de los proveedores mineros y el Gobierno es Lama. Barrick puso a un especialista para estudiar si es viable o no reabrir el proyecto, y ese ejecutivo elaboró un informe que ya está, según fuentes del mundo minero, en manos de los que toman decisiones en la multinacional. Fuentes del sector, principalmente de los proveedores, ya avisan que si las retenciones vuelven a la carga impositiva que ya tienen las compañías, habrá que olvidarse de Lama. Paradójicamente todo se habría dado en la misma semana, y tal vez el mismo día. 

¿Qué harán los senadores por San Juan? Es una gran pregunta que no tiene respuesta aún. Roberto Basualdo, alineado con Macri, votará en contra. Ruperto Godoy y Marina Riofrío esperan hablar con Uñac, charla que se dará en estos días seguramente. Ninguno de los peronistas quiere quedar como Gioja, se supone, por tanto hay esperanzas entre los mineros de que rechacen el proyecto, aunque en el PJ sanjuanino no lo terminan de confirmar. Esta semana, según medios nacionales, hubo contactos entre gobernadores peronistas para patear hacia adelante la sesión de senadores y que el tema se diluya para poder volver a repartir cartas, pero no se sabe si esa iniciativa va a prosperar.  

Nadie dice que mover el piso de Ganancias no era necesario, pero no en detrimento de provincias como San Juan, que se quedarán sin nada.