En horas de la noche del domingo pasado, se dio un caso de violencia en un domicilio del departamento Jáchal. Un joven identificado por Rodrigo Nahuel Pereyra le propinó una paliza a la mamá de su pequeño hijo y este martes conoció su condena.
El hecho sucedió cerca de las 22.30 del domingo pasado cuando un llamado a la Brigada de la UFI del Norte alertó sobre una mujer que estaba siendo golpeada. Cuando el personal policial llegó al domicilio, encontraron fuera de la casa a D. B. M. B., de 20 años de edad, quien se encontraba llorando y con un niño en brazos. Según el testimonio de la chica, había mantenido una discusión con su pareja con quien convive.
La chica manifiesta que Pereyra la golpeó físicamente, pegándole un golpe de puño en su rostro y patadas en la espalda, pero también en zona de la cintura y en los brazos mientras la tenía sujeta en el suelo para que no se moviera. Cuando D.B.M.B pudo huir, alzó a su hijo y salió del domicilio. La ira de Pereyra derivó en que el joven rompiera dos armarios, un caloventor, un espejo y que desparramara toda la ropa interior de la víctima por el fondo de la casa.
En ese momento que el personal policial entrevistaba a la joven mamá, Pereyra salió del domicimio y fue aprehendido. Lo cierto es que este martes fue condenado por el delito de lesiones leves en contexto de violencia intrafamiliar y daño, debiendo cumplir un año de prisión de cumplimiento condicional (sin encierro), exclusión del hogar, prohibición de contacto y de acercamiento a distancia no menor de 200 metros. Además se solicitó asistencia a la víctima para abordaje terapéutico y asistencia a tratamiento contra adicciones para el agresor.