Una multitud asistió a la jornada automovilística en torno al circuito Callejero de Buenos Aires para presenciar la primera competencia del año del Súper TC2000. Según los organizadores la cifra ascendió a un millón de espectadores. Una hora y media antes del comienzo de la final del Súper TC 2000 y cuando ya la actividad había comenzado con otras categorías, el ministro de Seguridad y Justicia, Guillermo Montenegro, había estimado en 600 mil los espectadores. Cámara fotográfica en mano y mochila cargada al hombro, en familia o con amigos, a pie o en bicicleta, los espectadores fueron ubicándose en el perímetro del trazado urbano emplazado en el barrio de la Recoleta formando filas de hasta siete u ocho personas sobre las vallas. Pese a que todos los sectores de acceso libre y gratuito tuvieron una convocatoria masiva, la ‘estrella‘ de la mañana porteña fue la Facultad de Derecho, sobre la Avenida Figueroa Alcorta, en cuyas escalinatas se sentó el público y ofreció una imagen digna de una postal. En el resto del perímetro, por ejemplo en la Plaza República de Chile o en Plaza Francia, también se agolpó el público que, orientado por personal destinado para tal fin, buscó la mejor ubicación para ver pasar las unidades. En cambio, si bien no lucieron a pleno antes del mediodía las tribunas corporativas VIP ubicadas sobre las Avenidas Figueroa Alcorta y Libertador, zona en la que los accesos costaban entre 800 y 2.400 pesos, al momento de la carrera final de Súper TC2000 sí completaron su capacidad.

POLÉMICA:

La carrera recibió fuertes cuestionamientos por falta de seguridad y escasos controles, además del daño ambiental y sonoro causado, al tiempo que expuso como ningún otro evento anterior los vínculos entre Mauricio Macri y el grupo Clarín, dado que el evento fue organizado por Auto Sport, una empresa del multimedios.

El secretario de Deportes, Claudio Morresi, había advertido a través de una carta enviada a Macri, que ‘si bien es cierto que hay empresas que se hacen cargo de la seguridad, esto nunca es tan seguro como cuando se realizan en un lugar con la infraestructura adecuada‘ y cuestionó que ‘al ser un espectáculo al aire libre se cobre entrada y el acceso no sea libre y gratuito‘.