El defensor del exoficial Pablo Guevara, Fernando Castro, pidió a los jueces de la Sala III de la Cámara Penal que declaren la nulidad del reconocimiento de su cliente por parte de un testigo que, por primera vez en todo el proceso, lo dejó señalado como uno de los tres partícipes de la golpiza mortal que recibió un preso en la seccional 6ta de Raswson la madrugada del 14 de diciembre de 2010.
El testigo en cuestión es Roberto ‘Pipi’ Barboza, un sujeto con antecedentes. El último miércoles había declarado que cuando estuvo detenido en la seccional, vio como tres policías golpeaban a José Leónidas Cortez (54) a pesar de que ellos les gritaban que no lo golpearan más. El hombre sufría osteoporosis y la terrible paliza le causó la muerte por múltiples fracturas en su tórax.
En la investigación, Barboza no había reconocido en rueda de personas a ninguno de los cuatro efectivos que ahora son juzgados por torturas seguidas de muerte y otros delitos. Pero durante su declaración ante el tribunal señaló sin dudar al calabocero y principal acusado en el crimen, Sergio Rabaj, y complicó por primera vez a Guevara como otro de los que pateaban a ese hombre que cayó preso por abusar de una nena en el ‘bosque’ del Parque municipal de Rawson.
Según el defensor, el reconocimiento de su cliente y también el de Rabaj, se hizo sin seguir las formalidades que marca la ley (como el hecho de que primero describa con detalles a la persona a reconocer), violando así garantías constitucionales en favor de su defendido. Rolando Lozano, defensor de Rabaj, también adhirió al planteo.
De todos modos el fiscal José Eduardo Mallea y el abogado de la familia de la víctima, Adrián Riveros, se opusieron. La fiscalía consideró que el reconocimiento realizado durante el juicio no se apartó de lo marcado por la ley. Y Riveros consideró además que el planteo fue extemporáneo.
El próximo martes, los jueces Ricardo Alfredo Conte Grand, Eugenio Barbera y Eduardo Gil, resolverán.