La dirigente social Milagro Sala fue condenada ayer a la pena de tres años de prisión en suspenso, al ser hallada responsable del delito de ‘daño agravado‘ en calidad de instigadora. En tanto, fue absuelta del delito de amenazas.

La líder de la Tupac Amaru, cuya inmediata libertad exigen organismos internacionales, seguirá en prisión por otras causas por supuestas irregularidades en el manejo de fondos públicos girados desde la Nación a su agrupación.

La líder de la Tupac Amaru, Milagro Sala, recibió ayer una condena de tres años de prisión en suspenso por daños, en tanto que fue absuelta por el delito de amenazas, en el marco del juicio por el ‘escrache‘ ocurrido en 2009 contra el entonces senador y actual gobernador provincial, Gerardo Morales. 

En su fallo, el Tribunal Oral Federal de Jujuy dispuso que la dirigente social realice trabajos comunitarios y también condenó a los cooperativistas Graciela López y Ramón Salvatierra a tres y dos años de prisión en suspenso, respectivamente, por considerarlos coautores de daños agravados materiales de los hechos investigados.

Los integrantes del Tribunal jujeño dispusieron los tres años de prisión en suspenso para Sala por el delito de daños cometidos durante la protesta, en tanto que la absolvieron por amenazas, al considerar que esa acusación ya se había extinguido.

Sala fue detenida el pasado 16 de enero, en tanto que este juicio fue iniciado a partir de una denuncia de Morales en la que la acusó de ser la instigadora del ‘escrache‘ que sufrió en octubre de 2009, cuando era senador nacional y le tiraron huevos durante una actividad en el Consejo Superior de Ciencias Económicas en la provincia.

Si bien los jueces dejaron en suspenso el cumplimiento de la condena, los representantes del Ministerio Público Fiscal y los abogados defensores solicitaron que sea de cumplimiento condicional. La lectura integral de la sentencia está prevista para el próximo 3 febrero.

Durante la audiencia final, la jefa de la organización Tupac Amaru, haciendo uso de sus palabras finales, se dirigió a los jueces y les reclamó: ‘No se dejen apretar por el poder político‘.‘No se dejen apretar por Morales‘, remarcó.

La lectura del fallo generó una sensación ambigua en el público, en su mayoría dirigentes kirchneristas, que primero estallaron en algarabía al escuchar la palabra ‘absolución‘ y luego expresaron un enérgico repudio cuando conocieron la ‘condena a tres años de prisión en suspenso‘.

La sentencia se convirtió en la primera derrota judicial de Sala en Jujuy, donde de pasar una década al calor del poder kirchnerista terminó con varias causas abiertas en su contra por delitos graves, que la mantienen detenida desde hace 11 meses con prisión preventiva.

Fuentes judiciales explicaron que en el caso de Sala el cumplimiento de la condena se diferiría hasta que se definan las otras causas en las cuales está imputada, que van de extorsión y asociación ilícita a amenazas. Los condenados deberán realizar tareas comunitarias por tres años en una sede de Cáritas. DyN y Télam