Tres argentinos, uno de ellos ‘cartonero‘, vestidos con ropas de trabajo, se sentaron junto a los altos delegados de todo el mundo que ayer asistieron a la misa de inicio de pontificado del papa Francisco, al que conocen desde hace años y que siempre -dijeron- ha luchado por la dignidad del hombre.

‘Una presencia deseada por el Papa. Los pobres junto a los poderosos‘. Con ese título, el diario del Vaticano, L’Osservatore Romano‘, contó que ayer asistieron a la misa Sergio Sánchez, recolector de cartones -‘cartonero‘, como son conocidos- de Buenos Aires; la monja misionera Ana Rosa Sivori, prima segunda del Papa; y José María del Corral, director de un centro educativo.
Sánchez acudió a la misa con el chándal azul y verde que utiliza para recoger materiales abandonados en las calles de la capital argentina y que pueden reciclarse. Pertenece al Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) y conoce a Jorge Mario Bergoglio desde hace cinco años, ‘cuando era más dura la lucha por el reconocimiento de la dignidad de los trabajadores‘, contó.

‘A la única persona que nos encontramos a nuestro lado fue el padre Bergoglio. También él luchaba contra las diferentes formas de esclavitud, contra la trata de seres usados como máquinas‘, señaló. Sánchez contó que en una ocasión, el actual Papa, acudió a una de sus protestas. ‘De él hemos aprendido a luchar para mejorar nuestro modo de vida‘, añadió.