Si bien el sistema de Presupuesto Participativo no es nuevo en el país, ni en nuestra provincia, hasta ahora son muy pocos los municipios que lo han implementado como una herramienta de la gestión municipal que ayuda a profundizar el estilo de vida democrático. Básicamente consiste en otorgar a los vecinos de un municipio la posibilidad de elegir, mediante el voto, qué obra o servicio debe ejecutar la comuna, en función a los anhelos, necesidades o requerimiento de esa comunidad.
En nuestra provincia dos comunas se han destacado en relación al uso de presupuestos participativos como método de lograr eficiencia y satisfacción de la gente, al poder concretar obras que eran solicitadas: las municipalidades de Santa Lucía y de Rawson.
Pese a que hay otros municipios que también tuvieron la intención de aplicar el sistema, pero que finalmente no tuvieron el éxito esperado, Santa Lucía fue una de las primeras, hace tres gestiones atrás. Gracias al Presupuesto Participativo la municipalidad pudo dar respuestas a varios planteos y avanzar en un sentido que a la comuna le habría costado mucho, ya que de esta forma se cuenta con el apoyo incondicional de los vecinos.
Otro municipio que se destacó fue Rawson, que desde principio de la década pasada estuvo definiendo obras mediante esta modalidad. El sistema sirvió de base para las futuras gestiones y continúa aplicándose, aunque con algunas limitaciones en el aspecto presupuestario. El intendente Juan Carlos Gioja, en su segundo mandato cuestionó los nuevos sistemas de distribución de la ayuda financiera a la comuna y dijo que la disminución de los fondos anunciada desde la Nación tendría incidencia en el Presupuesto Participativo.
La Municipalidad de Rosario, en Santa Fe, es una de las que mejor ha desarrollado y aprovechado el sistema, a tal punto que los vecinos ya han elegido los trabajos para este año. Se destacan entre ellos las iniciativas vinculadas con propuestas culturales, capacitación en oficios y proyectos vinculados a la seguridad y obras.
En San Juan tendremos que esperar que los intendentes terminen de organizar sus gestiones, para que se decidan a convocar a los vecinos, pese a que la mayoría en su condición de candidatos dijeron que aplicarían el sistema por considerarlo el más adecuado para una exitosa tarea.