Wanda Nara es una de las celebrities locales que hizo de la máscara de oro su tratamiento fetiche. Jimena Barón también forma parte del grupo y si de estrellas internacionales se habla, Bar Rafaelli, la diosa y modelo ex de DiCaprio, también conforma sus seguidoras. Por eso, para llegar espléndidas al verano, la máscara de oro es la opción a considerar.
El tratamiento ya está disponible en San Juan y entre sus beneficios logra reducir las arrugas atenuando las líneas finas de la piel, otorga un tono uniforme al rostro y brinda mucha luminosidad.
Andrea Julio Makeup Artist cuenta las bondades de un tratamiento ideal para quienes presentan signos de cansancio en su rostro, sobre todo después de los 40. “Su principal componente es el mineral de oro el que por sus propiedades antioxidantes es hidratante, descongestivo y ayuda a reducir las líneas de expresión. Estas características lo convierten en un tratamiento ideal para un clima como el de San Juan, que es caluroso y seco y por tanto agresivo con la piel”, explicó la esteticista.
Entre los componentes de la máscara también se encuentran el zinc, cobre, magnesio, miel y leche de cabra. Gracias a ello posee propiedades antiage, antiinflamatorias, energizante y además es antialérgica. “Puede utilizarse a partir de los quince años en adelante, por sus propiedades bacterianas y antiflamatorias es indicada para quienes tienen acné, psoriasis y resulta ideal como una previa al maquillaje ya que deja la piel luminosa y lozana”, detalló Andrea Julio.
Cuenta la historia que el uso del oro para el tratamiento de la piel es bastante antiguo. De hecho, hay registros que indican que la Reina Cleopatra hacía uso del preciado metal en sus conocidos tratamientos de belleza, al igual que buena parte de la realeza del Antiguo Egipto.
Actualmente los tratamientos con la máscara de oro pueden realizarse en gabinetes de centros de estética a un precio que oscila entre los $300 y $400 la sesión. Claro está, si es con oro de 24 kilates, es decir, oro puro, la cifra arranca desde los $2.200 por sesión.
Como los resultados son acumulativos, se recomienda una aplicación por semana. “En mi gabinete el 60 por ciento de mis clientes son adeptos a la máscara de oro, tanto mujeres como hombres y aunque resulte llamativo, son los varones los más dedicados al momento de cumplir con las diferentes fases de un tratamiento”, comentó la experta.
Cómo se hace
- Limpieza profunda del cutis con una emulsión para la posterior aplicación de una loción tónica o bruma termal. Estos productos permitirán la renovación de las células muertas de la piel.
- Con un aplicador se coloca la máscara de oro sobre el rostro. La máscara es en forma de crema y se la deja actuar entre 20 y 30 minutos.
- Finalizado el tiempo de exposición se retira la máscara y se brumiza el rostro con agua termal. El paso final es la aplicación de una crema con protección solar 30 para su protección.
- La máscara puede aplicarse en cualquier momento del día. Lo ideal es que su aplicación se repita al menos una vez por semana por sus resultados acumulativos.