Todo iba bien durante la interpretación de Open Your Heart, cuando Madonna sufre una caída mientras uno de sus bailarines arrastraba la silla en la que estaba sentada y tropieza. Ocurrió durante uno de sus conciertos del fin de semana en Estados Unidos, en la ciudad de Seattle.

El bailarín pierde el equilibrio y provoca que, tanto él como la diva del pop, como él terminen en el piso. Madonna rápidamente se levanta sonriendo y continúa el show cantando una de las canciones más icónicas de su carrera, en el marco de su gira "The Celebration Tour".

La "Reina del pop" a los 65 años está bien y ¡todo quedó en un susto y momento divertido!