Discusiones efusivas por diferentes puntos, incluidas las protestas a los árbitros. Cánticos de un lado y de otro aduciendo cierto ‘temor’ en el partido. Diversas banderas con apoyo a cada equipo y un marco de cuatro mil sanjuaninos en el mítico Aldo Cantoni, acorde a semejante cruce, fueron los ‘ingredientes’ del primer juego por la semifinal de la Liga Argentina entre UPCN y Obras.
El termómetro que anoche marcó en San Juan los 33º grados, en el estadio cubierto fueron más bastante mas debido al clima que hubo entre los equipos sanjuaninos. Es que un par de veces en el primer set y otro tanto en el segundo, las pulsaciones subieron bastante con los puntos protestados por los jugadores y cuerpo técnico de cada equipo. Los reclamos casi siempre dirigidos para los jueces. Pero fue en el tercero con el 16-12 para el gremial, que el técnico de Obras, Chiqui Wiernes, se mostró más que molesto cuando le reclamó a los árbitros un punto que entendía a favor de su equipo. Tuvo que mediar el capitán, Rodrigo Quiroga, y así la calma llegó nuevamente. En las tribunas, la ya clásica ’Banda del gremio’ le aportó el colorido y la percusión habitual. Del lado de Obras, la mayoría de sus hinchas se agruparon en la cabecera Norte, aunque también hubo simpatizantes distribuidos en los otros tres sectores. “El Obras tiene miedo…”, se escuchó en varias ocasiones, mientras que del otro lado los aplausos y gritos en cada punto también se hicieron sentir.
El cierre de la noche llegó con un claro 3-0 y el saludo entre ambos planteles. Todos sabiendo que la historia ya comenzó, pero le falta varios capítulos decisivos más.