Nada de capa, tacos altos ni corona. Un jean color claro, unas ojotas y una remera blanca fueron suficientes para su primera salida en calidad de Reina Nacional del Sol, pero fuera de protocolo. Y por iniciativa propia. María Emilia Colombo visitó a los alumnos de la escuela Malvinas Argentinas, en Rivadavia, con quienes compartió juegos y tareas.

La visita a esta escuela era un tema pendiente desde cuando era candidata a Reina del Sol. En aquel momento, 2 alumnas de esa institución le mandaron una carta pidiéndole conocerla. Ella les prometió una visita y cumplió. ‘Dije que apenas comenzaran las clases las iba a visitar. Como estuve en la Fiesta de la Vendimia, se retrasó la visita. Pero finalmente pude ir y la pasé realmente espectacular con los chicos’, dijo María Emilia.

La Reina contó que le sorprendió ver a todos los chicos formados para darle la bienvenida con un fuerte aplauso y cuaderno en mano para pedirle un autógrafo o algún dibujito hecho con su propia mano. ’Estuve en todas las aulas para poder conocer a todos los chicos y sin interrumpir demasiado las clases, aunque no ocurrió. Es que los chicos quisieron sacarse fotos conmigo, mostrarme sus cuadernos o invitarme merienda. Fue fantástico’, dijo la soberana.

Pero la mejor experiencia tanto para los chicos como para ella llegó casi al final del horario de clases. Visitó a los chicos de segundo grado, justo en la hora de música. Junto a los chicos armó un trencito para bailar y jugar. Antes de irse se despidió de los chicos y de los docentes de esta escuela, prometiéndoles volver si la agenda real se lo permite.