Buenos Aires 9 de abril.- La Corte Suprema no se referirá a los seis proyectos del Poder Ejecutivo para reformar la Justicia hasta tanto no sean aprobados por el Congreso Nacional para evitar que puedan ser recusados si en algún momento deben fallar sobre los mismos. Así lo aclaró el presidente del máximo tribunal, Ricardo Lorenzetti, en la presentación para todo el país del Plan Nacional de Capacitación Judicial.
"Luego de que sean sancionadas estas leyes puede haber litigios, como siempre hay con toda la legislación, y es muy probable que algunos jueces tengan que opinar. Es muy probable también que la Corte tenga que opinar", explicó Ricardo Lorenzetti.
Aunque aclaró que a los siete ministros que integran el máximo tribunal les parece "importante dialogar", recordó que deben "ser respetuosos de las instituciones" del país y aguardar a que el Poder Legislativo discuta las iniciativas.
"Quienes deben opinar y discutir ahora son los parlamentarios", señaló en la presentación del Plan Nacional de Capacitación Judicial que se realizó este mediodía en Tribunales.
De todos modos, el titular de la Corte justificó su decisión de participar en el anuncio que realizó ayer Cristina Kirchner: "Participamos de las iniciativas como actos institucionales, así corresponde a un país que tiene que tener instituciones".