El récord en ventas externas de esta fruta seca fue en el 2019,generando divisas por U$S 5,6 millones a cambio de 933 toneladas, según los primeros informes de la embajada argentina en Brasil.

Si bien este acuerdo alcanzado en torno a las barreras para arancelarias entre ambos países en diferentes productos representa nuevas oportunidades de negocios para provincias productoras como San Juan, Córdoba, Mendoza, La Rioja, Salta, Río Negro y Neuquén; lo cierto es que la competencia en este mercado se dará con proveedores de EEUU y Chile como principales proveedores de un mercado total de U$S 18 millones de facturación y un volumen de 4.255 toneladas. 

EEUU provee el 85%, Chile el 13% y el restante 2% está en manos de otras naciones productoras y exportadoras de este fruto seco.

Argentina en 2023 ha exportado almendras al mundo en muy pequeños volúmenes, habiendo registrado un máximo de 933 toneladas en el año 2019 por un valor de USD 5,6 millones. Esta apertura representa una gran oportunidad para aumentar el potencial del sector en provincias productoras como Mendoza, San Juan, Córdoba, La Rioja, Salta, Río Negro y Neuquén.

En nuestro país hay hoy unas 2.800 hectáreas con montes de almendros según relevamientos al 2018 que urge actualizar. Incluso un gran proyecto ubicado en Jocolí (Mendoza) ha implantando 900 hectáreas, que no aparecen en los censos. 

La apertura del mercado brasilero en el marco de las continuas negociaciones comerciales con nuestro mayor socio del Mercosur, Brasil, alientan las intenciones de plantación de un cultivo dónde más del 60% del costo inicial responde a las inversiones en plantación y sus primeros años de cuidado hasta la entrada en producción. Mientras que luego de la cosecha el costo más significativo es el pelado, absorbiendo un 19% del mismo.

Esto, sumado a las contingencias climáticas propias del clima sanjuanino como los Vientos Zondas en floración, heladas tardías y granizo; tal vez expliquen por qué aún este cultivo aún no termina de despegar en nuestra provincia.

NUESTRA PROVINCIA

De las 50 mil hectáreas cultivadas en la provincia según el INTA a diciembre del 2022, apenas unas 200 hectárea con montes de almendros posee San Juan, principalmente en Valle del Tulum. En el 2017 había sólo 357 hectáreas por las condiciones adversas a la producción y comercialización internacional de alimentos. En los últimos años se han registrado nuevas inversiones en departamentos como 25 de Mayo en el reemplazo de olivares, así como Sarmiento en nuevos polos de cultivos y zonas tradicionales como Quinto Cuartel en Pocito. Hay variedades de esta especie que responden con muy buenos rindes, unos 1.250 kilos por hectárea, en la variedad Guara, una de las más importantes hoy.

Las exportaciones de almendras en el 2022 representaron solo unos U$S 14 mil totales en virtud de las difíciles condiciones para el agro y las ventas en ese momento. 

Recordemos que desde el INTA en las décadas del 80 y 90 se promocionaron las plantaciones de las variedades de las denominadas almendras tipo "cáscaras de papel", como Nonpareil, Nec Plus Ultra, Peerless, etc y posteriormente, las condiciones de clima variante y el mercado llevaron a su cambio. En el año 2003, la EEA San Juan INTA y productores de almendro, introdujeron en sus montes la variedad Guara, de cáscara dura, de floración tardía, autógama, menos susceptible a las heladas, lo que incrementó las expectativas de rendimientos y comportamiento productivo del almendro. Ya en 2012 se implantó en el departamento de Pocito, la variedad Marinada, de cáscara dura, de precoz entrada en producción, auto fértil y de floración más tardía que Guara. Estas variedades desarrolladas en España provienen de programas de mejoramiento genético cuyo objetivo ha sido la obtención de cultivares de floración tardía, autocompatibles, autógamas y tolerantes a heladas tardías, aspectos de interés para mitigar condiciones climáticas adversas similares a las que se encuentran en la provincia de San Juan.