En la última compra que San Juan realizó para adquirir árboles destinados a forestación urbana, la provincia gastó $3.000 por ejemplar. Si se tiene en cuenta que fueron 5.000 de aguaribay, 3.700 de cina cina y 300 de fresno americano, el costo total de la licitación fue de unos $27 millones. Esa cifra, como mínimo debido a la actualización de costos por inflación, es lo que pretende ahorrar la secretaría de Ambiente con la creación de un vivero de plantas no nativas que produzca tres especies de árboles, que son las más utilizadas para plantar en plazas, barrios nuevos o en los procesos de reforestación.

Durante 2023, la última compra de la secretaría de Ambiente involucró a 9.000 ejemplares no nativos destinados a plantaciones de zonas específicas, de acuerdo al relevamiento técnico de especies recomendadas por departamento que tiene la Dirección de Arbolado Urbano. Este tipo de inversión, por lo elevado del monto, debe hacerse a través de licitaciones y el anterior llamado fue por un total de 27 millones de pesos.

Recursos. En el vivero pueden producir miles de plantines por año, a la vez que cuentan con personal altamente capacitado.

A partir de la premisa de reducir costos y optimizar los recursos disponibles es que la gestión de Orrego resolvió crear un vivero de plantas no nativas. El objetivo, explicaron, es comenzar a producir esas especies no sólo para evitar compras a privados, sino también para vender a empresas constructoras o particulares, por ejemplo.

El proyecto llevará su tiempo y por eso se desarrollará por etapas. En un primer paso, la meta será comenzar con el proceso desde mediados de año y generar al menos 2.000 plantines, para ir creciendo en cantidad con el paso de los meses.

Estos tres tipos de ejemplares no nativos fueron elegidos para la fase inicial ya que son los más comunes en el arbolado urbano, debido a características tales como gran versatilidad a los diferentes suelos y a las condiciones climáticas, así también como su rápido crecimiento.

En El Pinar

El proyecto de la secretaría de Ambiente se desarrollará en las instalaciones del Vivero de Plantas Autóctonas, que funciona en el Parque de la Biodiversidad, en El Pinar (ver aparte). Por lo tanto, el complejo pasará a generar especies mixtas, ampliando la variedad de ejemplares arbóreos y sin necesidad de salir a buscar otro lugar; optimizando a la vez los recursos humanos que están capacitados y calificados, informaron.

Así, en una etapa más avanzada, la iniciativa prevé que al momento de forestar o reforestar, esta combinación de especies permitirá trabajar de manera efectiva en el arbolado urbano, alternando nativas con no nativas. La ventaja que tiene la flora autóctona, como el algarrobo, el chañar o la brea, es que consumen menos agua.

 

Capacidad para 10.000 plantines

Con el objetivo de producir plantas y árboles autóctonos destinados a reforestar áreas degradadas tanto por actividad humana como por impactos naturales, es que en 2019 fue creado el Vivero de Plantas Nativas, en el Parque de la Biodiversidad. Este es el complejo que ahora ampliará su producción.

Actualmente, el vivero tiene capacidad para producir unos 10.000 plantines anuales de más de 20 especies diferentes, entre las que se destacan: algarrobo blanco y dulce, jarillas, acacias, retamos, quebracho blanco, talas o brea.

Allí se desarrollan todas las etapas del proceso productivo de los ejemplares, es decir, las tareas comienzan con la recolección de semillas en diferentes puntos de la provincia, luego se hace la limpieza, selección y clasificación de las semillas.

Posteriormente se realiza el proceso de escarificación (ruptura de la cubierta rígida de la semilla permitiendo que el embrión se hidrate con mayor facilidad), germinación, que depende de cada especie y el desarrollo de cada ejemplar. Alrededor de cuatro meses después, los plantines se encuentran en condiciones de plantarse.