En los últimos seis años, las redes sociales han sido el fenómeno más destacado de internet, conectando a más de 1.000 millones de personas que intercambian videos, fotos o deseos de feliz cumpleaños de último minuto. Pero, así como sirven para acercar a gente de todo el mundo, estos nuevos gigantes de la comunicación, concentran grandes cantidades de datos, números de teléfono y direcciones. Pero este tesoro para miles de compañías en el mundo han quedado bajo sospecha, que ayer el fundador de Facebook salió despejar.

En una carta publicada por el diario "The Washington Post", Mark Zuckerberg prometió a los usuarios "un mayor control de los datos personales" cambiando esos controles por "herramientas más sencillas".

Tras las numerosas denuncias y críticas sobre el uso de la información privilegiada que manejan las redes sociales, el presidente y fundador de Facebook reconoció que elaboró de forma demasiado escueta la administración de los datos personales, "algo que no quieren muchos".

Por eso, según reproduce la agencia DPA, prometió que "en las próximas semanas se intensificarán los controles de la esfera privada" y admitió que se cometieron "numerosos errores".

Zuckerberg, de 25 años, garantizó que Facebook no hará pública ninguna información personal sin permiso del usuario y que no pasará esos datos a clientes de publicidad, ni los venderá a nadie.

"El mensaje que más hemos oído últimamente es que las personas quieren controlar sus datos más fácilmente. En pocas palabras, muchos de ustedes creen que nuestros controles eran demasiado complejos. Nuestra intención era ofrecerles controles detallados (…). Nos equivocamos", indica en la misiva.

Entre los nuevos controles se incluirá el refuerzo de la privacidad de los datos que el usuario desea mostrar a toda la comunidad.

En Facebook los usuarios pueden crear perfiles e intercambiar con otros noticias, fotos y videos. En ese contexto, pueden decidir si comparten la información con todos o sólo con sus amigos.

Pero últimamente recibió muchas críticas por actuar de forma muy débil con los datos personales y muchos comenzaron a irse de la red, aunque no hay cifras concretas acerca del número.

Zuckerberg admitió que "los miembros se sienten confundidos por la configuración de protección de datos y que no la consideran lo suficientemente transparente".

Él mismo fue víctima, ya que a principios de año fueron visibles para todos una serie de fotos privadas por error, debido a que Facebook cambió de pronto las reglas de uso y la vista de imágenes pública se instaló como aplicación estándar para los usuarios.

Este fin de semana hubo más protestas cuando "The Wall Street Journal" informó que en algunos casos Facebook permitió a sus clientes de publicidad saber qué usuarios miraban sus avisos.

Zuckerberg no aclaró cómo se verán en el futuro las configuraciones de protección de datos, sino que sólo dijo que será más fácil desactivar en la plataforma de Facebook otros servicios asociados.

"The Financial Times" indicó que habrá tres clasificaciones básicas para la información: visible para todos, sólo visible para los amigos y visible también para los amigos de amigos.