Cuando en abril del año pasado se hizo público la intención del Gobierno de construir un nuevo matadero para que esté a la altura de los mejores del país, se dijo que “posiblemente” se iba a cerrar el viejo edificio que se ubica en Capital, porque ya no cumplía con las mínimas condiciones sanitarias. La noticia despertó el interés del gremio municipal SUOEM, que puso el grito en el cielo y sugirió que de ser así, sean reubicados en el nuevo matadero. Todavía no hay una decisión oficial. En el matadero municipal trabajan 160 empleados y el nuevo edificio incorporará a 69 personas, pero como lo manejará un privado, no tendría la obligación de absorber a ese personal.
Duro informe
En el estudio que encargó el gobierno provincial a la Universidad Católica de Cuyo y al cual DIARIO DE CUYO pudo acceder, se realizó una dura crítica de las condiciones actuales del matadero municipal, argumentan que el edificio no es apto para faena y que está totalmente obsoleto. Esgrimen que la planta de afluentes no logra frenar la contaminación y que ello genera un grave perjuicio a los barrios lindantes. Además hacen mención al déficit económico anual que tiene el matadero: Unos $600 mil. Un dato clave es que todo lo que se faena va al mercado local, porque no cuenta con la certificación de “Tránsito Federal” para que pueda salir de la provincia.
