-¿Qué esperan de la gran minería para 2010?

-La verdad que un año muy importante, el del Bicentenario. Esperamos poner en marcha de Casposo. El montaje de la planta está bastante avanzado y para nosotros sería una gran satisfacción este logro en este año especial, porque significará mano de obra y por ende trabajo digno y sueldos dignos. En definitiva trabajo genuino para los calingastinos. Otro acontecimiento esperado ya pudimos concretarlo, que es la firma de resolver a través de un crédito internacional, la remediación de las escombreras de sulfato de aluminio, algo que significa muchísimo desde el punto de vista ambiental. Más que contaminantes un problema estético para un departamento en donde se desarrolla la actividad turística y agropecuaria.

-¿Para cuándo estará a pleno la tarea de remediación?

-Son entre 8 y 11 meses para entregar el proyecto de lo que se va a hacer y una vez evaluado por la Secretaría de Minería de la Nación se llevará a licitación para el tema de la remediación en sí. Este proceso de 8 u 11 meses significa la participación ciudadana de talleres que se harán con la consultora internacional, para que la participación de este distrito este conforme con lo que se presentará a la Nación.

-¿A qué sectores han pedido participación?

Hemos hablado con las autoridades de la Escuela Manuel Sabio que tiene orientación minera, para que sus estudiantes participen y para que esto salga consensuado. La verdad que con estas novedades, también me gustaría tener alguna lucecita con el proyecto El Pachón. Xstrata tiene oficinas en el departamento y hay algunos indicadores que muestran un futuro. Además, el precio internacional del cobre sigue subiendo y se sigue sosteniendo. Ojalá tengamos novedades.

-Por lo visto las expectativas no son solamente por Casposo…

– El Pachón es un proyecto de larga data y es muy esperado. También tuvimos buenas nuevas en la Feria Internacional de Toronto, en Canadá, donde Minera Andes realizó el anuncio de sus reservas del proyecto de cobre Los Azules, con una buena ley. También se habló de Altares, aunque el que se anunció fue Azules. La verdad que el potencial minero que tenemos es fantástico y ojalá que los dirigentes podamos desarrollar políticas que aseguren inversiones de este tamaño.

-Hizo referencia al estado de avance de la planta de Casposo, ¿hay muchos calingastinos trabajando en esta construcción?

– Sí, de menos 200 personas que hay trabajando con las empresas subcontratadas, 85-90 son calingastinos. Eso es muy importante porque tengo entendido que la empresa necesitará para el proceso cerca de 230 personas. A esto se le agrega la construcción de la línea energética de 500 Kw que va a llevar un año se construcción, y ahí se va a ocupar mucha gente.

-Esto va a ser muy importante como fuente laboral y desde el punto de vista de la capacitación que le implicará a la gente…

– Absolutamente, sobre todo porque se tratará de cuestiones que nunca se habían ejecutado en Calingasta y así demostrar el potencial de su gente.

-Hemos hablado de lo que esperan de la minería, ¿qué falta a nivel social y económico en lo que respecta a la actividad?

-Si pensamos en el impacto que provoca en el tema del salario, la ocupación de la gente y su mejor calidad de vida, creo que debemos trabajar fuertemente en políticas que acompañen como la construcción de viviendas, avanzar en el tema educativo y salud.

-¿Y con respecto a las regalías que próximamente recibirá el municipio?

-Debemos establecer qué obras de infraestructura hay que hacer para el crecimiento de Calingasta, en esto a mí también me gustaría apuntar a potenciar el tema deporte, el sector agropecuario, turístico. Ver qué podemos invertir de la plata de la minería en otras actividades económicas. El uso de las regalías será una excelente demostración de que con los recursos mineros se puede hacer crecer otros sectores. En el sector agropecuario, por ejemplo, se presentan grandes desafíos, como la incorporación de la tecnología, con la plata de la minería industrializar los productos y sacarlos con denominación de origen. En el sector turístico, equiparnos, modernizarnos, para tener buen nivel para el turismo internacional si es posible.

-¿Qué es lo que ya se está haciendo con las empresas mineras que operan en el lugar?

-Con Casposo estamos haciendo escuelitas de deporte, apoyo a ONG, capacitación en soldadura, máquinas cargadoras, seguridad e higiene, es decir, todo lo que permitirá que la gente pueda enfrentar la demanda de la mina. En el caso de Xstrata Copper, Proyecto El Pachón, también se han hecho muchas cosas. A una cooperativa agrícola se le donó un tractor e implementos agrícolas, a la Escuela Albergue de Álvarez Condarco se la puso a nuevo con ampliaciones, cierre perimetral, renovación de baños. También estamos trabajando en el reordenamiento urbano de Calingasta y en el by pass de la ruta 149. Hay muchas cosas en conjunto.

-A raíz de Casposo, la empresa operadora mostró la intención de reflotar Castaño Nuevo. ¿Hay una vuelta a la revalorización de Calingasta como pionera en lo que respecta a minería?

– Es importante el convenio que se firmó entre la empresa y el dueño, creo que tiene cuatro años y durante este tiempo se espera probar las posibilidades del yacimiento. Si así se comprueba, la empresa estará en el departamento por mucho tiempo más.

-¿Es el retorno de Calingasta como el departamento minero por excelencia?

– Las posibilidades están dadas. En aquella época no había la tecnología ni la conciencia ambiental de hoy, si se concreta lo de Castaño significará más mano de obra para la gente pero con una visión responsable y respetuosa. Lo importante es que es una muestra más de que se puede apuntar a una minería sustentable y buscar el crecimiento en los recursos disponibles. Es una respuesta para los que siguen pensando que en la Capital, la capital del país me refiero, funciona la República Argentina. Es la respuesta para algunos funcionarios que demagógicamente quieren hacer política con la minería, sin conocer.

-Su opinión apunta al federalismo…

-La problemática de la pobreza en la Capital, la inseguridad, la droga y muchos otros temas son parte de la falta de políticas de estado que tienen que ver con la darle la espalda a las provincias argentinas. Hay que hablar de federalismo en serio y esto tiene que ver con que las provincias puedan aprovechar sus recursos y volcarlos al bienestar de la gente.

-Según su perspectiva, ¿la minería es una expresión de federalismo?

-Sin dudas la minería es una expresión de federalismo. Estos son los recursos que nos dio el Señor, vivir pobres, tener una riqueza que la estamos pisando y no poderla convertir en recursos para la gente sería muy triste. Esto lo tendría que haber hecho hace años y hubiéramos tenido una provincia mucho más próspera. Creo que está comprobado que hemos crecido muchísimo.